Madrid
La nueva baliza de la DGT sustituirá al triángulo y, desde el 1 de enero de 2026, será el único medio legal de señalización de vehículos inmovilizados. Cada año fallecen en España alrededor de 25 personas atropelladas en carretera cuando bajaban del coche a colocar la señal.
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Los datos que emite la V-16 son anónimos. La DGT sólo conoce la ubicación del vehículo inmovilizado cuando la baliza está activada. No registra la velocidad, ni hace seguimiento alguno a la vez que no transmite datos personales, ni nombre del conductor ni matrícula del coche y no es necesario descargarse ninguna aplicación ni dar datos personales.
Recientemente, la Agencia de Protección de Datos recordó que la baliza no está asociada a una persona y no hay registro que vincule el dispositivo con la identidad de quien lo utiliza.
¿Cuánto cuesta?
Su precio medio está en torno a los 50 euros y, antes de comprar la baliza, puede comprobar en la web de la DGT las marcas y modelos certificados. La infracción por no llevar el dispositivo es leve y su sanción es de 80 euros, misma cantidad que la establecida para el que no llevara los triángulos de preseñalización.
Los inventores de la baliza
Detrás del invento no está ni la DGT ni una multinacional. Fue idea de «Los Jorges» (Jorge Torre y Jorge Juan Costas) que así se llaman los dos ex-guardias civiles gallegos que después de ver y asistir a muchos atropellados en carretera cuando se bajaban del coche a colocar el triángulo, decidieron inventar y fabricar el prototipo.
Al principio, como cuenta Jorge Torre a la Cadena SER, crearon el artefacto de forma casera entre la cocina y el garaje de su casa, probando con todo y con todos los que tenían alrededor. A partir de ahí una de las empresas más destacadas que tiene la patente del dispositivo original es Netun Solutions que tiene sede principal en la ciudad gallega de Vigo.