VALÈNCIA. Las galerías de arte contemporáneo de la ciudad de València renuevan su cara por última vez en este 2025 con una batería de inauguraciones que en los últimos días han refrescado las propuestas expositivas de no pocos espacios culturales. Uno de los puntos calientes de en la agenda cultural de esta semana es, sin duda, la galería Luis Adelantado tras la inauguración de la muestra El sueño de la serpiente, un proyecto comisariado por Johanna Caplliure que, en esta ocasión, marca un punto de inflexión en la extensa historia del espacio. 

Y es que con esta muestra se cumple una década desde que Olga Adelantado asumiera la dirección artística de la galería, un hito que ha servido de núcleo para configurar un proyecto que habla del pasado, presente y futuro del espacio. La obra de la artista Carmen Calvo se erige como piedra angular de una selección de piezas y artistas que reconecta con algunas firmas vinculadas a los inicios de la galería y otras más jóvenes, un paseo en el que se entretejen obras de Susy Gómez, Mar Arza o Eva Lootz generando un diálogo que no es solo una celebración del espacio sino una declaración de intenciones.

También de aniversarios va la cosa en la galería Tuesday to Friday, que inauguró recientemente la segunda parte de la exposición por su quinto aniversario, bajo el título Nice to See You / Hope to See You Again (Paper) en esta ocasión centra en obras sobre papel a través del trabajo de artistas como Fernando Tinoco, Gema Quiles o María Tinaut, entre otros. Por su parte, la galería Benlliure reúne a algunos de los pesos pesados del arte valenciano, firmas como Soledad Sevilla, Manolo Valdés o Juan Genovés que se dan cita en la 28ª Muestra Benlliure. 




  • Obra de Keke Vilabelda. –


Otra de las citas destacadas ha sido la inauguración de Paisajes del desplazamiento, en la galería Jorge López. La muestra plantea un proyecto conjunto entre el artista Federico Miró y el valenciano Keke Vilabelda, que se ha convertido en uno de los protagonistas del circuito expositivo en este último tramo del año, pues el Centre del Carme acoge actualmente su proyecto Common Ground. En este caso ambas firmas forman un proyecto que es uno pero, también, señala sus diferencias, unos paisajes que pasan por los materiales ‘duros’ de Vilabelda, como el cemento o el metacrilato, a un Miró que mira a la tradición textil. 

La valenciana Marina Puche, por su parte, despliega en la galería Alba Cabrera la exposición Blanc Paguí. La ilustradora, que quizá muchos tengan en mente por sus diseños de falla, imprime su particular sello en distintos formatos, como la escultura o piezas cerámicas, así como en una intervención creada específicamente para el espacio, un trabajo que tiene e color, humor y vitalidad que caracterizan su trabajo como hilo invisible.




  • Resonancia desplazada, de Carlos Sebastiá. 


Carlos Sebastiá es el protagonista de la nueva apuesta de Shiras Galería, que acoge desde esta semana De lo simbólico a lo diabólico, un proyecto cuya semilla está en una fotografía tomada desde la ventanilla de un  tren en movimiento. A partir de ahí el artista despliega una serie de obras en las que profundiza en la memoria como territorio en constante mutación, un recorrido entre lo que permanece y lo que inevitablemente se transforma. La propuestas de Sebastiá, con todo, no es la única con la que Shiras renueva su oferta, pues el Espacio Refugio reúne las esculturas de Daniel Schweitzer, Miguel Bañuls y Agustín Serisuelo en la muestra Black & White.

Otro de los nombres que marcan esta renovación expositiva es el de Teté Durá, que presenta en galería Thema una decena de pinturas originales de gran formato centradas en la representación de rostros de mujeres, retratos que emergen de la unión de fragmentos de materia vegetal sobre un soporte de madera. Bajo el lema de Salacadula, la exposición habla de la fuerza interior, la resiliencia y los procesos de transformación femenina a través de una serie con gran “carga emocional” y “magnetismo visual”.