En el matrimonio Cerdán-Muñoz, es ella, Paqui, la que lleva la voz cantante. «Es una mujer de armas tomar» dice, sobre la esposa del presunto cabecilla de una trama de corrupción que presuntamente operaba desde la sede del PSOE, una vecina de … Milagro, la pequeña localidad de Navarra de la que es originario Santos Cerdán.

Junto a la única hija de ambos, que está estudiando Medicina en una universidad privada de Madrid -donde los tres residieron un breve periodo de tiempo-, los Cerdán-Muñoz decidieron fijar hace muchos años su lugar de residencia en este pueblo de la Ribera Arga, muy cerca de la industria de vegetales en la que trabajó antes de dar el salto a la política el patriarca.

Los dos se conocieron en el pueblo, al que ella viajaba en autobús desde la localidad sevillana de Los Corrales para pelar espárragos. De ahí se ganó el apodo de «la andaluza». Pero ni la localidad ni la pequeña vivienda adosada en la que vuelven a residir ahora, tras el encarcelamiento de Cerdán, ya en libertad condicional otra vez, fueron muy del agrado de la esposa del exdirigente socialista, que «presionó» a su marido para «que le dieran un cargo en Madrid». Hasta que lo consiguió para tener «mejor vida». Ella mismo alardeaba de eso.

Tras haber sido candidato del Partido Socialista a la alcaldía de Milagro, quedándose en concejal -ya que logró un mal resultado en las urnas- y diputado foral y número dos del PSN, Santos Cerdán encontró su oportunidad de triunfar en la capital con las primarias que catapultaron a Pedro Sánchez a la secretaría general del PSOE en 2017. El político, completamente desconocido entonces incluso dentro de su propio partido, «puso el PSN al servicio de Sánchez para obtener un beneficio personal». Hizo ese viaje junto a Koldo García, un portero de club de alterne al que conoció en Navarra y con el que, según la UCO, presuntamente ya tenía presuntos a medias.

«Con las altas esferas»

La entrega al candidato, que logró de nuevo el poder orgánico, le permitió a Cerdán dar a su esposa aquello que siempre había soñado: «vivir en Madrid y codearse con las altas esferas». El matrimonio, tras ser señalado por la corrupción, y mientras todo el Partido Socialista, con el presidente a la cabeza, defendía «su honorabilidad», eran habituales de los mejores restaurantes, de la zona VIP del Hipódromo de La Zarzuela e incluso eran invitados a cenar a la sede de la Presidencia del Gobierno por el matrimonio Sánchez-Gómez.

Entre los vecinos de la familia del exsecretario de Organización del PSOE hay quienes sitúan también a Paqui Muñoz en muchos de los movimientos de su marido desde hace años. «Ella es la que le ha manejado siempre a su gusto», indica una de sus vecinas sobre la señora que, según la UCO, contaba con una tarjeta a nombre de Servinabar 2000, la constructora en el centro de la presunta trama corrupta, para sus compras personales.

La mujer de Cerdán habría gastado miles de euros cargando a la cuenta de la mercantil, que lograba importantes licitaciones públicas, sus caprichos personales y la decoración del ático con terraza que compartían en una de las zonas más exclusivas del barrio madrileño de Chamberí.

Francisca Muñoz, que según la Guardia Civil cobró también miles de euros en su cuenta bancaria procedentes de Servinabar, tiene una pensión de invalidez total desde hace muchos años. La esposa de Santos Cerdán logró jubilarse anticipadamente por un accidente en la fábrica que le provocó una afección en un pie, pese a que tras el encarcelamiento de su marido se difundieron imágenes usando zapatos de tacón y caminando a gran velocidad. Esa invalidez permanente de 640 euros mensuales permite a Muñoz no tener que trabajar, por lo que «se pasaba el día en casa o de compras» indica otra vecina que la conoce bien.

«Tiene mucho tiempo libre para maquinar», bromea, con una sonrisa, otro vecino a las puertas de un almacén de hortalizas a medio camino de los domicilios de Cerdán y de su hermana Belén, el gran apoyo familiar del político, concejala en el consistorio de Milagro gobernado por el Partido Socialista -pese que se dio de baja del PSOE por el trato a su hermano tras el informe de la UCO que le condujo a prisión-.

Ahora, según fuentes del entorno familiar, es también Paqui Muñoz, indican, la que está planificando el futuro a corto plazo de su esposo. Electricista de profesión, aunque con diez años sin ejercer de ello, ya que ha ido concatenando cargos públicos. El expolítico se plantea volver a trabajar en su sector, cuando deje de cobrar los 3.142 euros mensuales que tiene derecho a percibir como indemnización después de haber cesado como diputado en el Congreso. Su mujer, sin embargo, le recomienda seguir sus pasos.

Jubilación anticipada

Según ha podido saber ABC de fuentes del entorno familiar del exsecretario de Organización socialista, Paqui Muñoz quiere que su marido pida la jubilación anticipada, aunque solo cumple el requisito de la edad requerida. Este derecho permite a los trabajadores retirarse antes de los 65 años. Generalmente, se exige haber cotizado un número mínimo de años y aceptar una reducción en la pensión por cada año de adelanto.

Esta modalidad de jubilación está pensada principalmente para quienes desempeñan trabajos físicamente exigentes o quienes enfrentan situaciones de desempleo prolongado. Y aunque ninguno de los dos casos corresponde a su situación, si Cerdán quisiera optar finalmente por avanzar la edad de jubilarse debería hacerlo usando la dificultad para reengancharse con su edad al mundo laboral en el que se desempeñaba antes de dedicarse al completo a la política. Dejar de trabajar le provocaría al exsecretario de Organización del PSOE una merma importante en sus ingresos mensuales, ya que la reducción de su pensión sería importante.