Lo que debía ser un otoño tranquilo para Cayetano Martínez de Irujo, de 62 años, recién casado con Bárbara Mirjan, de 29, se ha convertido finalmente en un nuevo episodio de complicaciones médicas. Su boda del 4 de octubre en Sevilla llegó solo dos semanas después de una operación de espalda que, en principio, había evolucionado de forma satisfactoria. Sin embargo, la estabilidad se quebró de golpe tras una infección posquirúrgica que lo ha devuelto a una convalecencia.
El aristócrata había sido intervenido para resolver una hernia discal que llevaba tiempo causándole molestias. Este tipo de lesión aparece cuando uno de los discos que separan las vértebras se desplaza o se rompe, comprimiendo raíces nerviosas y provocando dolor, pérdida de movilidad y, en ocasiones, episodios de incapacidad funcional. La cirugía busca liberar esa presión y estabilizar la zona afectada, un procedimiento que requiere reposo y un seguimiento médico estricto. A pesar de ello, y pese a la proximidad de la fecha, la recuperación inicial fue positiva y le permitió celebrar su enlace con absoluta normalidad.
Cayetano Martínez de Irujo y Bárbara MirjanGJN
No obstante, todo cambió pocos días después. En declaraciones a ¡Hola!, el jinete explica cómo su recuperación se torció en apenas unas jornadas. «Me operaron antes de la boda y todo fue fenomenal. Pero, a los pocos días, volví a tener unos dolores inhumanos en la espalda por una infección… He pasado unos días terribles», detalló. El deterioro no se limitó al plano físico. «Psicológicamente, todo esto me ha afectado bastante… Llevo catorce operaciones en los últimos ocho años y ha sido muy duro», añadió, dejando entrever el desgaste acumulado tras una larga trayectoria quirúrgica.
Como consecuencia, la recaída obligó a posponer la misa anual en memoria de su madre, la duquesa de Alba, que cada 20 de noviembre reúne a la familia en Sevilla. El conde de Salvatierra negó que se trate de una cancelación definitiva y lo atribuyó únicamente a su situación médica. Su intención, asegura, es celebrarla «cuando esté bien».
Cayetano Martínez de Irujo y Bárbara Mirjan en su bodaGTRES
Delicada salud
Los planes personales tampoco han escapado a este contratiempo. La luna de miel, prevista inicialmente para antes de Navidad, ha quedado aplazada. Entre los destinos que barajaban figuraban el sudeste asiático, Australia o Nueva Zelanda. Sin embargo, el viaje tendrá que esperar. «Ha sido bastante grave y todavía sigo recuperándome», declaró. Por ahora, el matrimonio permanece en Las Arroyuelas, la finca sevillana donde residen, a la espera de que su estado permita retomar los compromisos aplazados.
Esta nueva complicación se suma a un historial médico especialmente severo. Desde 2014, cuando sufrió una obstrucción intestinal que requirió una intervención de urgencia, el hijo menor de la duquesa de Alba ha atravesado múltiples operaciones. En 2015 afrontó una peritonitis grave y varias cirugías en un corto espacio de tiempo. En 2016 pasó por quirófano en tres ocasiones en menos de dos meses para corregir una ileostomía. Y en 2021 volvió a ingresar por otra obstrucción intestinal que lo mantuvo hospitalizado durante once días.
Aunque el problema actual tenga un origen distinto, vuelve a poner de relieve la fragilidad sanitaria que arrastra desde hace casi una década. Las infecciones posquirúrgicas en la zona lumbar suelen provocar una sintomatología intensa y limitante, lo que explica la necesidad de reposo absoluto. El propio duque reconoce que, por ahora, solo necesita «unos días más» y «mucha tranquilidad» para recuperar la normalidad. Cuando alcance esa mejoría, asegura que retomará tanto la misa en homenaje a su madre como los planes pospuestos tras el enlace.