El suicidio de las dos adolescentes de Jaén no es un caso de acoso escolar

La Policía Nacional, que se ha hecho cargo de la investigación, indaga sobre los motivos por el que las dos adolescente decidieron quitarse la vida. Los agentes de la Policía Científica ya estuvieron peinando cada palmo del lugar donde ser hallaron los dos cadáveres. Mientras que los grupos de Unidad de Delincuencia Violenta (UDEV) de Jaén están investigando sus vidas para dar con la clave.

Por el momento está decretado el secreto del sumario por parte de la autoridad judicial, pero la autopsia preliminar revela que las dos chicas murieron ahorcadas. Las fuentes consultadas por ABC reseñan, además, que los cadáveres no tenían signos de violencia. Al mismo tiempo explican que tampoco había en el lugar de los hechos indicios de la participación de terceras personas.

Esos dos evidencias sustentan las hipótesis de las Policía Nacional del suicidio conjunto de las dos adolescentes. Además, las jóvenes dejaron mensajes de despedida a sus familias. Cartas que sustentan aún más la hipótesis de que las dos jóvenes se suicidaron.

Rosmed y Sharit salieron de sus casas juntas el viernes por la tarde y no regresaron. Cuando ya se hizo demasiado tarde, sus padres salieron a buscarlas. No cogían el teléfono y nadie sabía dónde estaban. Buscaron por la ciudad y llegaron al llamado Parque de la Concordia, aunque la llamada a Emergencias que avisa del hallazgo de los dos cadáveres lo reseñó como «parque de los patos».

Allí, las familias se dieron de bruces con la tragedia. Las dos adolescentes estaban colgadas, ahorcadas en los árboles de aquel parque. «Suspendidas», reza el aviso que se pasó a los bomberos para que acudieran al rescate de los cuerpos colgados de las ramas.

Un instituto activó el protocolo por autolesiones a una de las jóvenes

La Consejería de Educación de Andalucía ha confirmado este lunes que una de las dos menores fallecidas en Jaén tenía activado un protocolo de seguimiento por conductas autolesivas durante el pasado curso escolar, mientras cursaba sus estudios en el IES Santa Catalina. El seguimiento preventivo había sido activado el año de antes en el IES El Valle. Entre estas intervenciones figuraron el trabajo de la orientadora del centro y de la enfermera escolar, así como la coordinación con el ámbito familiar para reforzar el acompañamiento y la detección temprana de posibles situaciones de riesgo.

La Junta ha remarcado que estos protocolos se activan con carácter preventivo para la detección, valoración y seguimiento de alumnado que pueda presentar conductas de riesgo, siempre con el objetivo de ofrecer apoyo especializado y garantizar la protección del menor dentro del entorno educativo.

Eran las 1.30 horas de la madrugada del sábado. El padre de Sharit no esperó a la ayuda y descolgó a la niñas. Trató de reanimarlas, pero no pudo. Al lugar acudieron efectivos del parque de bomberos de Jaén, así como de la Policía Local y de la Policía Nacional, que se hizo cargo de la investigación.

Los sanitarios del 061 desplazados hasta el lugar de los hechos no pudieron hacer nada tampoco por reanimarlas, ya «estaban frías» y solo pudieron certificar la muerte de las dos jóvenes. Los cuerpos llevaban sin vida, al menos, un par de horas en aquel céntrico parque. Un lugar dónde los jóvenes se acercan a pasar las horas con sus amistades. Punto de reunión en el que nadie vio nada. Aquellos árboles se llevaron dos vidas en la más absoluta discreción.

Un doble suicidio que tiene conmocionada a esta pequeña capital de provincia de Andalucía y que la familia de las dos niñas no se lo cree. «Quieren montar el suicidio perfecto, cuando es el homicidio perfecto», ha dicho el padre de la menor de 16 años este lunes en Canal Sur. El progenitor que halló y descolgó los dos cuerpos dice que su hija era feliz, confirma que no sufrió nunca acoso escolar.

Del mismo modo, el padre contó en las entrevistas televisivas que a las 21.41 horas el teléfono de su hija tenía registrado un mensaje de la otra joven diciéndole que se iba a quitar la vida. Además, reseñaba que sobre las 21.45 horas la respuesta de su hija fue mandar un mensaje al que era su novio para poner punto y final a la relación.

Por su parte, la madre de Sharit, que también estuvo presentes en varias televisiones, explicó que, a juicio de la familia, no cuadran algunas de las pruebas aportadas al caso. Apunta que las cartas dejadas por las menores se contradicen y que no hay concordancia en los mensajes de los teléfonos móviles. Es por lo que ha dicho este lunes por la mañana que «hay algo raro» en la muerte de las jóvenes este fin de semana en Jaén.