Los paneles posiblemente defectuosos del fuselaje del avión A320 procedían de la compañía sevillana Sofitec, según la presentación que Airbus ha compartido con algunos de sus clientes.
Así lo ha recogido Bloomberg y otros medios internacionales, que sitúan el fallo en los componentes facilitados … por esta firma al fabricante aeronáutico, que ha tenido en los últimos que instalar a marchas forzadas un software anterior para no ver interrumpida su actividad.
El mercado ha castigado a esta compañía con una caída de sus acciones del 10% y, de hecho, Airbus ha revisado a la baja la entrega de aviones de esa familia tras registrarse este fallo en el ‘software’ de control de vuelo de las aeronaves.
«Airbus es responsable, independientemente de quién sea el proveedor», explican a ABC fuentes del gigante tecnológico. Además, añaden que «se trata de una fuente dual, con un proveedor externo y otro interno» y que «la no conformidad se originó en el proveedor externo».
Sofitec, que ha rechazado responder a las preguntas de ABC, es un fabricante de aeroestructuras que produce también componentes del fuselaje del A350 o la pintura de estructuras de repuesto del sistema de reabastecimiento del A330MRTT. Recientemente, se había adjudicado un contrato para abastecer de piezas de alta tecnología al A321.
También tiene como clientes al estadounidense Spirit Aerosystems o a GKN Aerospace (Reino Unido), Tata (India) o Turkish Aerospace Industries (Turquía). Nació en 1999 como empresa de ingeniería de producción y diseño de utilaje y en la actualidad cuenta con 85 certificaciones de Airbus, 12 de Boeing y 28 de Embraer.
Más tarde, la firma se especializó en fabricación metálica de respuesta rápida y corte de metales y se trasladó a Aerópolis para incorporar en 2006 las nuevas instalaciones centradas en la fabricación de chapistería. En 2007 decide dar el salto a ‘built to print’ en fibra de carbono e invierte en ingeniería y gestión integral de este tipo de programas.
A partir de 2014, la firma impulsa el desarrollo internacional y, posteriormente, se traslada a las instalaciones industriales actuales -ubicadas en Carmona (Sevilla)- con unos 100.000 metros cuadrados, que le permiten crecer con contratos de mayor tamaño.