Sales de la estación. La Gran Vía está cortada y el Metro de Madrid, abarrotado. Todo el mundo ha salido de compras por el Black Friday. Cruzas la calle del Postigo de San Martín, que desemboca en la plaza de Callao, sorprendida por las nuevas luces que se parecen a una sopa letras. Intuyes que forma parte del alumbrado. Es viernes, se acerca la Navidad y el centro está a reventar. En la estación de Sol, varios ojos curiosos miran unos extraños tentáculos negros que cubren la placa de la estación. Arriba hay un rótulo publicitario, y eso lo explica todo: es un “portal al mundo del revés” que anuncia la temporada final de Stranger Things.
A finales de noviembre se estrenó la quinta entrega de esta conocida serie de Netflix, en la que unos niños viajan a otro mundo sobrenatural mediante portales como el que se imita a la entrada del suburbano. Desde el jueves previo a las rebajas y hasta el próximo 13 de diciembre habrá otras pistas similares alrededor del edificio de Telefónica, en plena Gran Vía, como parte de un evento de la compañía de streaming en el Espacio Movistar. El edificio es privado, pero el juego también se extiende a la vía pública.