Los proyectores son dispositivos muy interesantes con los que poder obtener una experiencia muy peculiar a la hora de ver una película o disfrutar de una buena serie. Pero, como todo producto tecnológico, hay una tremenda diferencia entre lo profesional y lo pensado para el público general. Y el último proyector que he podido probar va de lo primero, porque su etiqueta de 6.999 euros no es una carta de presentación pensada para todos los mortales.
Y sí, quizás estés pensando que con esa cantidad de dinero podrías hacer muchas cosas o incluso comprar siete proyectores de muy buena calidad, pero el Sony XW5100 no tiene nada que ver con eso. Es sencillamente un proyector con tecnología de sala de cine en un tamaño reducido para que lo puedas meter en casa. No es compacto (pesa 16 kilos), pero es bastante pequeño si lo comparamos con uno de una sala de cine real.
Después de probar durante años muchos proyectores de muy buena calidad, experimentando grandes avances en las tecnologías DLP y LCD, el XW5100 es algo totalmente diferente a todo lo que había visto hasta ahora. Y no, tal vez nunca vaya a tener un proyector como este en casa, pero he podido comprobar que no existe nada mejor.
Un proyector que brilla con oscuridad
Lo primero que impresiona al encenderlo no es su potente brillo, al contrario. Y es que, si la imagen a mostrar es de color negro, la oscuridad predomina en la habitación, nada que ver con las lámparas de otros proyectores, que muestran un color grisáceo debido al tipo de iluminación usada. El secreto de Sony está en la incorporación de la tecnología SXRD, una pantalla reflectante de cristal de silicio que permite obtener negros muy profundos y una resolución de imagen 4K nativa tan increíble que la imagen parece estar pintada en la pantalla (me acerqué para divisar píxeles y no los encontré).
El proyector Sony XW5100. (Carlos Martínez)
Resulta bastante increíble ver cómo el propio proyector casi no es capaz de generar mi propia sombra cuando me coloco delante de la proyección de una imagen completamente en negro, algo que sí ocurre en mi proyector XGIMI Horizon Pro, un aparato de muy buena calidad que se queda en pañales al lado de este monstruo.
Un mando que lo dice todo
En pleno 2025, cualquier mando de televisor o proyector cuenta con más de un botón dedicado a servicios de streaming. Sin embargo, aquí no vas a encontrar ninguna referencia a Netflix, Disney+, Prime Video o cualquier otro servicio de vídeo bajo demanda. ¿La razón? Muy sencilla. El tipo de usuario que adquiere este proyector no usa estos servicios, tiene una colección de Blu-ray con los que disfrutar de la mejor calidad de imagen posible.
El mando del proyector. (Carlos Martínez)
Y es que los servicios como Netflix cuentan con algoritmos de compresión que reducen la calidad de la imagen para favorecer las transferencias de datos, y eso, a los amantes del buen cine con mucho dinero disponible no les gusta. Abrir Netflix con este tipo de proyectores se consideraría sacrilegio, de ahí, que ni se plantee.
Esto no evitará que puedas conectar a cualquiera de los dos puertos HDMI que integra un dispositivo multimedia como un Google TV Streamer o un Apple TV, pero podrías ser considerado persona non grata en el club de la buena imagen. Avisado quedas.
Conectores en el lateral del proyector. (Carlos Martínez)
En lugar de iconos de Netflix, YouTube o la Play Store, aquí encontrarás ajustes directos a varias calibraciones de imagen (entre los que se encuentra el modo referencia con calibración perfecta de fábrica), correcciones de color y controles de brillo, nitidez y contraste. Es lo que esperaría un experto en la materia, y es justo lo que el proyector ofrece. Máximo control de la imagen, aunque con la calibración integrada y las tecnologías de corrección que se incluyen no vas a necesitar mucho más.
El mando junto al proyector de Sony. (Carlos Martínez) Respira premium en cada detalle
El majestuoso cuerpo de 46 centímetros de ancho y 47 centímetros de profundidad luce bastante espectacular con un diseño que recuerda a una nave espacial, de líneas llamativas y un gigantesco ojo en el centro donde la óptica con zoom de 1,6x acapara todo el protagonismo.
La parte trasera del proyector. (Carlos Martínez)
Esta lente cuenta además con sistema de desplazamiento, lo que permite ajustar la proyección de manera horizontal y vertical para que puedas colocar el dispositivo de manera más cómoda en el lugar que necesites sin perder definición ni superficie de proyección.
El proyector en acción. (Carlos Martínez) Un conjunto que debe estar al mismo nivel
El problema de equipos como este es que todo lo que lo rodea debe estar al mismo nivel. De nada sirve contar con un proyector de 7.000 euros si no tienes un sistema de sonido que esté a la altura, por no hablar de la pantalla de proyección, ya que ni se te ocurra disparar con un bicho así a la pared.
Viendo una peli en casa. (Carlos Martínez)
Y es que estamos hablando de un producto diseñado para entusiastas del más alto nivel, ya que cubre una serie de necesidades que muy poca gente sabría apreciar. Aquí no se trata de ver la tele en formato grande ni de disfrutar de un partido de fútbol en el jardín. Estamos hablando de requisitos y detalles a niveles obsesivos, del tipo nivel controlar la iluminación de la sala en la que se proyecta. Si te sientes identificado con ello, este es sin duda el proyector (y la inversión) de tu vida. No tengo duda alguna.
La alternativa que no existe
Teniendo en cuenta que se está hablando de la perfección hecha proyector, resulta muy difícil encontrar una alternativa que pueda hacer sombra a la propuesta de Sony. Una solución comercial, con cierto aire doméstico y este nivel de calidad de imagen, es muy difícil de obtener, así que lo único que podrías encontrar son propuestas que se ven muy bien, pero que caen al lado del proyector tradicional. Un ejemplo es el XGIMI Horizon 20 Max, un proyector 4K nativo de triple láser que ofrece 5700 lúmenes y 200.000:1 de contraste. Por 2.999 euros es un proyector caro, pero alcanzable.
XGIMI Horizon 20 MAX
Cómpralo aquí
Otro modelo en esta línea sería el Hisense C2 Ultra. Al igual que el XHIMI tiene ese aire lifestyle con un diseño con gimbal integrado y presume de tecnología TriChroma. Buen contraste, garantía de experiencia gaming fluida y un precio similar son algunas de sus otras prestaciones.
Hisense C2 Ultra
Mejor precio disponible
La propuesta más asequible que podemos hacerte es el JMGO N1S Pro. Este proyector 4K con láser triple es cómodo de usar, ofrece una ficha técnica interesante y, sobre todo, rebaja el precio respecto al Hisense en 1.000 euros.
JMGO N1S Pro
El precio más bajo disponible
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