Grifols parece haber recuperado el pulso en Bolsa con los avances de su filial en Egipto, mercado clave para la compañía de medicamentos derivados del plasma. Así, sus acciones han subido este jueves más de un 3,57%, hasta 10,73 euros, tras unos últimos tiempos de bajadas. De hecho, los títulos ceden un 21% desde el máximo anual de 13,70 euros, alcanzado a finales de julio.

Así, la farmacéutica ha anunciado este jueves que ha alcanzado en Egipto la autosuficiencia clínica en tres medicamentos derivados del plasma esenciales: inmunoglobulinas, albúmina y factores de coagulación para trastornos hemorrágicos, a través de su proyecto Grifols Egypt for Plasma Derivatives (GEPD).

Según Grifols, Egipto se ha convertido en el sexto país a nivel mundial en lograr la autosuficiencia de plasma. Este hito se produce cinco años después de que Grifols y el Gobierno del país firmaran una alianza en 2020 para desplegar el primer ecosistema integral de plasma del país, África y Oriente Medio, con una inversión conjunta de 280 millones de euros. Egipto es un mercado estratégico para la empresa, que hace pocos días nombró máximo responsable en el país a Tomás Dagá, veterano directivo y consejero de la propia Grifols, cercano a la familia fundadora.

La compañía ha señalado que GEPD garantiza una distribución regular y sostenida de fármacos elaborados con plasma egipcio en hospitales públicos y centros de salud, asegurando la cobertura de pacientes con enfermedades crónicas o raras, sin depender del mercado internacional. Según Grifols, es la primera vez que Egipto se abastece de manera autosuficiente, con medicamentos derivados de plasma nacional, tras décadas en las que el país dependía casi por completo del plasma importado, principalmente de Estados Unidos, lo que suponía una vulnerabilidad estructural sanitaria que el Gobierno egipcio había identificado como prioridad estratégica nacional.

La compañía explica que sigue trabajando para consolidar en Egipto toda la cadena de valor para la fabricación de medicamentos derivados del plasma nacional en el propio país y para garantizar el suministro a toda la población egipcia en el largo plazo. Actualmente, Grifols cuenta en el país con 16 centros de donación, a los que se sumarán cuatro adicionales durante 2026.

Además, cuenta con un laboratorio de análisis y un centro logístico de plasma integral que garantiza trazabilidad y control máximo en toda la cadena de valor, como viene ocurriendo en todas las operaciones de Grifols desde el año 1971. Adicionalmente, Grifols está finalizando la construcción de una planta de procesamiento de plasma en Egipto, cuya primera fase estará operativa en 2026. La compañía ha señalado que los centros de donación han superado los controles de la PPTA y de las autoridades europeas para asegurar el cumplimiento de los estándares más elevados de seguridad y calidad de los procesos.

“La autosuficiencia de plasma en Egipto marca un antes y un después para la salud pública del país. Haber convertido un objetivo estratégico nacional en una realidad tangible es un logro que combina innovación científica y compromiso. Egipto es un mercado clave para Grifols; su escala y su posición en la región lo convierten en un punto estratégico”, ha señalado Tomás Dagá.