La estructura del capital mundial se encuentra en permanente transformación, influenciada por una volatilidad que redefine constantemente quiénes ostentan el mayor poder financiero del planeta. Al iniciar diciembre de 2025, el listado de Forbes refleja un escenario donde la innovación digital, la exploración aeroespacial y, sobre todo, la carrera por la inteligencia artificial dictan el ritmo de los mercados. Los ajustes bursátiles ocurridos durante noviembre han provocado un barajar de cartas significativo en la cúspide de la pirámide económica, dejando ver ascensos meteóricos y correcciones severas en las valuaciones corporativas.

Este dinamismo ha consolidado un «top 10» dominado casi en su totalidad por líderes de la industria tecnológica estadounidense, con una única excepción proveniente del viejo continente y del sector del lujo. A continuación, desglosamos cómo queda el ranking de las personas más ricas del mundo, con las cifras convertidas a la moneda europea.

Un podio reconfigurado por la carrera espacial y los algoritmos

El liderazgo indiscutible continúa en manos de Elon Musk. Su patrimonio, estimado en unos 458.850 millones de euros (483.000 millones de dólares), se mantiene en la cima gracias a una diversificación estratégica sin precedentes. Aunque Tesla sufrió correcciones en su valoración, el empresario sudafricano ha visto cómo sus otras apuestas, específicamente SpaceX y la firma de inteligencia artificial xAI, compensan cualquier caída. La valoración de su compañía aeroespacial roza cifras históricas, mientras que su división de IA negocia rondas de inversión que la sitúan como un actor decisivo del futuro.

Sorprendentemente, el segundo lugar ha sido reclamado por Larry Page. El cofundador de Google ha superado a sus competidores directos tras un incremento patrimonial notable, alcanzando los 248.900 millones de euros (262.000 millones de dólares). Este ascenso del 14% en el valor de Alphabet responde al éxito de Gemini 3, la última iteración de sus modelos de lenguaje, demostrando que el buscador sigue siendo el rey de la publicidad y la data.

En la tercera posición encontramos a Larry Ellison, quien ha descendido un escalón tras una caída abrupta en las acciones de Oracle. Su fortuna se sitúa ahora en 240.350 millones de euros (253.000 millones de dólares). Pese a perder valor bursátil en noviembre, Ellison sigue siendo una figura central gracias a su participación en «Stargate», el megaproyecto de infraestructura para centros de datos que promete ser la columna vertebral de la computación futura.

La diversificación corporativa y el impacto filantrópico

Jeff Bezos ocupa la cuarta plaza con un patrimonio de 232.750 millones de euros (245.000 millones de dólares). El fundador de Amazon continúa con una estrategia de diversificación que abarca desde el dominio del comercio electrónico hasta la gestión de Blue Origin y la startup tecnológica Project Prometheus. Su enfoque demuestra que mantener los huevos en distintas cestas es clave para la estabilidad en tiempos volátiles.

Justo detrás aparece Sergey Brin, cerrando el «top 5» con 229.900 millones de euros (242.000 millones de dólares). El socio de Page en la creación de Google ha vuelto a involucrarse activamente en el desarrollo técnico de la IA. Además, Brin ha destacado este mes por su perfil altruista, transfiriendo acciones por valor de más de mil millones de euros a su fundación Catalyst4, enfocada en la salud neurológica y el cambio climático.

Mark Zuckerberg conserva la sexta posición con 210.900 millones de euros (222.000 millones de dólares). La apuesta de Meta por la realidad mixta y los modelos generativos sociales mantiene la confianza de los inversores, permitiendo al creador de Facebook sostener su inmensa riqueza basada en el 13% de participación que posee sobre la compañía.

El bastión del lujo y la resiliencia financiera tradicional

Bernard Arnault resiste como el único representante no estadounidense y ajeno al silicio en este selecto grupo. Ubicado en el séptimo lugar con 180.500 millones de euros (190.000 millones de dólares), el patriarca de LVMH demuestra la solidez del mercado de bienes exclusivos. Marcas como Louis Vuitton y Dior siguen siendo refugios de valor, y la integración de sus cinco hijos en la directiva asegura la continuidad del imperio francés.

Las últimas tres posiciones reflejan la tensión del mercado de hardware. Jensen Huang, CEO de Nvidia, cae al octavo puesto con 146.300 millones de euros (154.000 millones de dólares) tras un ajuste del mercado, aunque su empresa sigue siendo vital para la producción de GPU. Michael Dell se sitúa noveno con 144.495 millones de euros (152.100 millones de dólares), impulsado por la demanda de servidores corporativos.

Finalmente, el décimo lugar marca el regreso de una leyenda: Warren Buffett. El «Oráculo de Omaha» vuelve a la lista con 144.400 millones de euros (152.000 millones de dólares). Su conglomerado, Berkshire Hathaway, creció un 8%, y curiosamente, parte de su éxito reciente se debe a una inversión estratégica de 5.000 millones de dólares en Alphabet, demostrando que incluso el inversor más clásico sabe adaptarse a los tiempos de la tecnología.