La derrota ante el Casademont Zaragoza dejó tocadas anímicante a las jugadoras y así se pudo apreciar en una dolida Elena Buenavida tras el partido, cuando se mostró contundente a la hora de señalar que «hicimos una muy buena primera parte pero las cosas tienen que cambiar, por el staff y por la afición. Tenemos que rematar los partidos».
Rubén Burgos, por su parte, se lamentó también de un final de partido que asegura que van a analizar para encontrar los motivos de tan flojo último cuarto. «Felicito al Zaragoza, han hecho una excelente segunda parte y un buen último cuarto. Habíamos empezado el partido con las cosas muy claras, siguiendo el plan de partido y con buena defensa, fluía el balón en ataque y los lanzamientos entraban. Dominar el rebote nos permitía transiciones. Todo cambió tras el descanso, ya no estábamos fluidas ni con buenas acciones de tiro, pero el último cuarto hay que analizarlo, veremos lo que ha fallado, teníamos que mejorar el nivel defensivo quizá por cansancio, por normas defensivas que hemos dejado de cumplir, el parcial se ha ampliado y ha sido imposible. Entran dudas, es humano, pero agradecemos a los aficionados el apoyo y el equipo está comprometido».

Elena Buenavida, con gesto serio al final del partido. / Germán Caballero
En la misma piedra
Respecto al hecho de haber dejado escapar otro partido al final, tal y como pasó ante el Perfumerías Avenida en la LF Endesa, añadió el técnico que «intentamos aprender de eso, de los últimos minutos contra Avenida, queríamos que sus generadoras no pudieran crear ventajas, por minutos lo hemos conseguido, pero al final ha estado muy bien Leite, la han encontrado y veremos qué normas podíamos haber mejorado. Algunas buenas posiciones de tiro liberadas, tanto en pintura como en lanzamientos abiertos, no han entrado y eso nos ha condicionado la mentalidad de la defensa. Un mal ataque nos ha llevado a una peor defensa. Las dudas del ataque se han transmitido, podíamos haber tomado mejores decisiones.
Autocrítica
Hemos intentado controlar, queríamos seleccionar buenos espacios de tiro sin perder nuestra identidad, nuestra confianza, queríamos alargar el partido y sumar, no hemos conseguido encontrar esas faltas, soy el máximo responsable y la mayor exigencia es la de uno mismo. Lo mental es muy importante y la cohesión, intentaremos trabajar, mejorarlo y volver el domingo con la mejor de nuestras fuerzas.
Revancha el domingo
Burgos espera que el golpe anímico no pase factura en el partido del domingo ante el mismo rival y en el mismo escenario. «Me preocupan las cosas que puedo controlar y vamos a ocuparnos y en mejoraras en ayudar al equipo. Es una prueba más contra un muy buen rival que nos va a exigir lo mismo o más».