Cuando Leo Fiebich anotó, desde el tiro libre, el 61-42 a 9:08 para el final del partido nadie en el Roig Arena, ni … siquiera entre los aficionados del Casademont Zaragoza, podía imaginar lo que iba a comenzar desde entonces. Las mañas se soltaron, primero con un parcial de 0-7 que forzó el tiempo muerto de Burgos (61-49), para seguir recortando la ventaja ante un equipo que se hizo pequeño. Muy pequeño. Diminuto. Invisible. Tanto, que perpetró el peor último cuarto de la historia del club. Al menos, desde que consiguió dar el salto de nivel para lograr convertirse en uno de los grandes. Los infames nueve minutos que siguieron a esos dos tiros libres, permitieron al equipo de Zaragoza empatar, 61-61 por medio de Ortiz, y remontar con una canasta de Leite para poner un 0-21 y el 61-63 en el marcador que hizo explotar de alegría a los aficionados maños presentes en el Arena. Para ese momento, el Valencia Basket ya estaba igual de bloqueado que en Salamanca donde el Avenida le levantó un 31-45, que habían amasado las taronja gracias a un gran nivel de juego y que tiraron a la basura con un infame último minuto. La historia se repitió, pero a lo bestia. El Zaragoza estiró el parcial hasta un 0-26 en nueve minutos que se llevó por delante el partido (61-68). Romero rebajó al 63-68 pero ya era tarde hasta para recortar algo de average. La debacle taronja empata a los dos equipos con 4-3 en el arranque del Grupo F y obliga a las de Burgos a ya no fallar en casa ante Venecia y Landes.
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De nada sirvió el 41-25 al descanso, que reflejó casi a la perfección la gran diferencia que se vio entre los dos equipos en pista en la primera parte. Un Valencia Basket muy sólido en defensa, forzó 10 pérdidas al Casademont Zaragoza. Ese mismo trabajo atrás tuvo su incidencia en los malos porcentajes de la mañas, aunque es cierto que en el 9 de 29 en tiros de campo de las visitantes también se sumó una mala puntería en lanzamientos abiertos que tuvo como reflejo a Hempe, que se fue al descanso con un rotundo 0 de 7.
Tras el tanteo inicial en los primeros tres minutos (4-4) llegó un cambio de marcha del Valencia Basket que resultó decisivo en el devenir de la primera parte. Todo comenzó con un triple lejano de Fiebich (7-2) y las taronja fueron haciendo grande el parcial con el paso de los minutos. Primero, con un 8-0 para forzar el tiempo muerto de Cantero con 12-4 en el marcador, que se estiró a un 18-5 en cinco minutos, que cerró Fam tras pase de Araújo (22-9). Al final del primer cuarto la renta ya era clara para las de Rubén Burgos (25-14). El segundo, comenzó con otro parcial de 6-0 para las valencianas (31-14 anotado por Fam) y la ventaja creció con un triple de la debutante Coffey, que anotó el primer balón que tocó (34-16). La máxima renta del Valencia Basket llegó a ser hasta de veinte puntos en el tercer cuarto (51-31) pero el aterrador parcial final de 12-39 lo tiró todo a la basura. Para reflexionar. Y mucho.
Valencia Basket: Romero (10), Casas (7), Fiebich (14), Araújo (7) y Alexander (2), cinco inicial, Buenavida (12), Fam (6), Coffey (5), Ben Abdelkader (-) y Lekovic (-).
Casademont Zaragoza: Ortiz (5), Vorackova (8), Pueyo (2), Fingall (8) y Hempe (7), cinco inicial, Leite (23), Bankole (2), Flores (5), Gueye (3) y Mawuli (7).
Parciales: 25-14, 16-11 (41-25), 15-15, (56-40) y 7-30 (63-70).
Árbitros: Paulina Gajdosz (POL), Diogo Martins (POR) y Oleksandr Dotsenko (LUX).
Incidencias: 2.963 espectadores.