El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha paralizado el proyecto de la Ciudad del Deporte del Atlético de Madrid al declarar nulo el acuerdo de la Junta de Gobierno de José Luis Martínez-Almeida que, en octubre de 2024, aprobó el plan especial … de la Ciudad del Deporte del Atlético de Madrid. La Sala determina que los usos asociados (terciarios de hospedaje, oficinas, terciario recreativo y comercial) son contradictorios con el uso de la parcela principal. Por este motivo, la Sala concluye que la modificación establecida por el plan especial debió haberse tramitado por una modificación del plan general.
En la resolución a la que ha tenido acceso ABC, los magistrados dictaminan que existieron irregularidades en la tramitación por parte del Ayuntamiento de Madrid, que recalificó la parcela a través de un plan especial en lugar de haberlo hecho a través del plan general y, además, que debería de haberse sometido a una evaluación ambiental.
«La modificación establecida por el plan especial debió haberse tramitado por una modificación del plan general y no por tal instrumento, determina que en todo caso dicha modificación debió ser sometida a la evaluación ambiental estratégica en algunas de las modalidades previstas en dicha normativa de aplicación».
Los magistrados dictaminan que existieron irregularidades en la tramitación por parte del Ayuntamiento de Madrid
Además, en la sentencia también se sostiene que el Ayuntamiento de Madrid no justificó adecuadamente el interés público del desarrollo ni acreditó el cumplimiento de los requisitos urbanísticos exigidos por la normativa vigente. La Sala concluye que la actuación impugnada carecía de la «motivación suficiente» y presentaba deficiencias en los informes que debían sustentar su aprobación.
Todo ello es lo que, según los magistrados, «impide sostener la validez del acuerdo» y obligan a retrotraer las actuaciones. En este sentido, subrayan que «esa motivación» no era «suficiente y adecuada como para justificar que una modificación como la presente se formalice a través de un plan especial».
Este proyecto supone la creación de un gran complejo deportivo, de ocio y naturaleza alrededor del Metropolitano, en el distrito de San Blas-Canillejas. Así, el Ayuntamiento cede dos parcelas de 60.000 m2 al Atlético de Madrid para que construya dotaciones deportivas municipales que, una vez finalizadas, serán entregadas al Consistorio para su gestión. Los trabajos estaban previstos que finalizarán en el verano de 2026.
Según informa Cibeles, en la primera parcela, se levantará una pista de atletismo reglamentaria de ocho calles y con capacidad para ser sede de campeonatos oficiales. La parte central de dicha pista acogerá un campo de fútbol 11 de medidas reglamentarias que será divisible en dos campos de fútbol 7. Además, en esta parcela se construirá un campo adicional de fútbol 11, otro de fútbol 7 y una pista cubierta de calentamiento de atletismo de 110 metros.
La segunda parcela de instalaciones municipales contará con cuatro pistas polideportivas cubiertas para la práctica de deportes de equipo como balonmano, fútbol sala o voleibol, entre otros, además de cuatro pistas de pádel descubiertas. En las otras tres parcelas que compondrán la Ciudad del Deporte, el Atlético de Madrid levantará un centro de alto rendimiento para entrenamiento y actividad de los equipos de las distintas categorías del club, un miniestadio, pistas de pádel y otras actividades deportivas, así como usos complementarios y asociados permitidos por el planeamiento.
La oposición critica el «pelotazo» de Almeida
La izquierda en Cibeles ha censurado el «nuevo revés» judicial que confirma que este proyecto no era más que un «pelotazo» de Almeida. «Es un regalazo a un club privado a costa del patrimonio de la ciudadanía», señala el concejal de Más Madrid, José Luis Nieto. Pues, tal y como explica, el alcalde acabó por «ceder suelo público para que el Atlético de Madrid montara sus negocios privados al explotar las parcelas con fines comerciales y lucrativos y no deportivos como estaba estipulado».
El PSOE, por su parte, lamenta que el gobierno municipal desoyera sus advertencias. «No nos hizo caso», sostiene el concejal Antonio Giraldo tras conocer que la Justicia ha tumbado el proyecto. «Desde que empezaron a gestar en octubre de 2024 el plan especial, advertimos de que no era compatible con la normativa urbanística e hicimos un escrito de alegaciones y votamos en contra en el pleno del Ayuntamiento», incide.
Para el edil, el fallo de la sentencia responde a un error base en la gestión de los populares. «Esto es lo que pasa cuando se hace urbanismo a la carta y no en función del interés general, sino para beneficiar determinados intereses particulares». En todo caso, exige al equipo de Almeida que asuma sus responsabilidades políticas: «El Ayuntamiento añade una condena más a su ya larga lista de condenas y anulaciones que tiene por parte de los Tribunales. Esto es una vergüenza», añade Giraldo.
Por el momento, el área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, que dirige Borja Carabante, no se ha pronunciado sobre la sentencia ni ha replicado a sus adversarios políticos.