Miércoles, 10 de diciembre 2025, 19:16
Una vez capeado el ruido sobre los atrasos de Dreamland y de las ayudas del Gobierno de Canarias, la planta noble del Club Baloncesto Gran Canaria centra la mirada en lo estrictamente deportivo, consciente del delicado momento que atraviesa el equipo claretiano concretamente en la Liga Endesa.
A pesar de que la octava plaza -la que da derecho al último billete copero- se sitúa a una sola victoria de distancia, lo cierto es que los aspirantes a esa última llamada se elevan a ocho equipos, evidenciando el radical contraste con la zona alta y la cada vez más poblada clase media.
El ‘tirón de orejas’ del presidente del Cabildo, Antonio Morales, durante el brindis navideño celebrado el pasado martes, dejó aún ecos en plenas vísperas del choque ante el Kosner Baskonia -sábado a las 19.00 horas en el Gran Canaria Arena-, considerada como una «final anticipada» incluso para el máximo mandatario claretiano, Sitapha Savané: «Suena a tópico recurrente, pero en este caso se cumple.
Ante el Surne Bilbao podíamos decir que teníamos una semifinal y esta semana tenemos una auténtica final», recalcó el también expívot amarillo en dicho acto, donde estuvieron presentes los componentes y el staff técnico del equipo. «Quiero pedir a los jugadores un esfuerzo último. La sociedad no ve bien que el entrenador diga que no ha habido hambre para afrontar un partido. Les pido ese esfuerzo para conseguir ese hito y salvar la situación que nos hemos visto abocados por los últimos resultados, que seguro que lo vamos a conseguir», señaló Morales en el acto en el que parecía reconducirse la relación con Dreamland, a la vez que se daba este pequeño recado a la plantilla, que acumula un balance de 3-6 en la competición doméstica.
No obstante, Savané pidió de forma sutil un paso al frente por parte del equipo, al mismo tiempo que garantizaba el blindaje de los jugadores ante fricciones ulteriores o económicas: «Hablo cada día con (Willy) Villar y (Jaka) Lakovic y nunca me han transmitido desconfianza alguna con lo que tenemos, sino una necesidad de que los jugadores rinda al nivel que sabemos que tienen».
Superado el discurso financiero, Savané recordó que «no pedimos a un taponador que meta triples, pero hay jugadores que están por debajo de lo que pueden dar. No hace falta dar nombres». En cualquier caso, el presidente claretiano mostró su firme confianza tanto en la plantilla como en el staff técnico y la dirección deportiva, convencido de que la ecuación surta por fin efecto ante un Baskonia también necesitado.
Anotación
El Granca es el último de la liga en cuanto a anotación (79,6 puntos por partido), muy lejos del Valencia (96,8).
Rebote
Los amarillos son penúltimos en esta faceta con 33,2 capturas por encuentro.
Soluciones y preocupaciones
Para Jaka Lakovic, consolidado ya como el tercer técnico con más triunfos en la historia de la entidad, esta cuarta campaña se le está atragantando tras la reconfiguración del pasado verano. Su meticulosidad y disciplina táctica -una EuroCup y una final continental lo avalan- lleva a una metabolización de su pizarra a una cocción lenta -aunque continua- que a algunos de los fichajes le está llevando un tiempo extra de adaptación. En numerosas ocasiones lo ha dejado entrever el propio estratega balcánico, consciente de que cada vez hay menos margen para errores y probaturas.
Ya en lo estadístico, hay facetas del juego que han hecho mella en las hipotéticas opciones del Granca de sumar más triunfos hasta ahora. Por una parte, es el equipo que menos anota de toda la liga (79,6 puntos de media frente a los 96,8 puntos del líder, el Valencia). Por otro lado, el rebote -uno de los capítulos en los que Lakovic más ha insistido en que se debía mejorar- es otro de los talones de Aquiles del equipo, siendo el penúltimo en capturas (33,2 por partido).
Porcentajes de tiro
El triple (34,1%) ha dejado de ser solución, pero preocupa especialmente el tiro libre, cuyo acierto no alcanza el 70 por ciento (69,3%).
Pero uno de los aspectos más sangrantes para el preparador amarillo es el acierto de cara a aro, ya que el triple -en el pasado, una de las principales bazas del plantel- se ha convertido en todo un hándicap -10º de la ACB con un 34,1%-. El tiro de 2 tampoco mejora demasiado (14º con un 51%), pero el tiro libre es, sin duda, la faceta que más quebraderos de cabeza ha dado, siendo el último de la liga con un 69,3%. En definitiva, el equipo necesita tomar confianza y ante el Baskonia solo cabe lanzar el gran órdago hacia la Copa.
Reporta un error