El Consejo Europeo de Investigación (ERC/CEI) ha concedido una subvención ‘ERC Consolidator Grant’ de 1,8 millones de euros al físico Mikael Chala, de la Universidad de Granada, para un proyecto que pretende detectar huellas del enfriamiento del universo tras el Big Bang. El estudio, denominado PC-TP², desarrollará herramientas teóricas para predecir con precisión las señales de ondas gravitacionales que podrían haberse generado en transiciones de fase del cosmos temprano, similares al agua hirviendo. El objetivo final es distinguir este acontecimiento de otros fenómenos astrofísicos, utilizando datos de detectores como LIGO, Virgo y el futuro observatorio espacial LISA.