Viernes, 12 de diciembre 2025, 17:09
La curva epidémica de la gripe en Canarias ha escalado verticalmente en la última semana y la incidencia alcanza ya los 125,4 casos por cada 100.000 habitantes, frente a los 74,6 de la semana previa, según recoge el informe emitido por Salud Pública correspondiente a la primera semana de diciembre.
El aumento de la transmisión está afectando principalmente a los niños y niñas menores de cuatro años. «En ese rango de edad tenemos 4.800 casos por 100.000 habitantes. Eso significa que prácticamente 5 niños de cada 100 están sufriendo una infección respiratoria aguda en Canarias. A estos menores de entre 0 y 4 años hay que sumar los otros cinco de cada cien que tuvieron gripe durante la semana previa y los 3,7 que la pasaron hace dos semanas», detalla el jefe de Vigilancia Epidemiológica de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, Álvaro Torres.
Así y todo, la situación epidémica de la gripe en Canarias sigue siendo, de momento, mucho más favorable que en la península y el archipiélago se mantiene en el escenario 1 de la epidemia, es decir, en nivel de riesgo bajo o moderado. «En la península la gripe ha entrado fortísima. Canarias siempre va con dos semanas de retraso respecto al resto del Estado que, a su vez, suele ir con un par de semanas de retraso respecto a lo que ocurre en el Reino Unido», puntualiza Torres.
Nueva mutación
En todo caso, la expansión de la gripe se ha adelantado este año unas cuatro semanas respecto a la temporada previa. Esta anticipación se atribuye a la rápida transmisión del subclado K entre una población que carece del recuerdo inmunológico ante la nueva mutación de la gripe A.
Otra buena noticia es que, de momento, las hospitalizaciones por infecciones respiratorias agudas no han experimentado un aumento notable en las islas. Actualmente, la tasa de ingresos es de 11,4 casos por 100.000 habitantes.
En este escenario de riesgo bajo, el protocolo para afrontar la gripe establece la recomendación de usar mascarilla para personas con síntomas catarrales y en espacios frecuentados por población vulnerable, como los servicios de urgencias, oncología y áreas destinadas a personas inmunodeprimidas. «Las mascarillas solo serán obligatorias en los ámbitos sanitarios si alcanzamos un escenario de riesgo muy alto», comenta Torres. A este nivel de circulación máximo de la gripe se suele llegar una vez cada diez años.
Más vacunaciones
Ante la certeza de que la transmisión del virus aumentará en las próximas semanas, la población canaria se está protegiendo. En la primera semana de diciembre, la vacunación contra la gripe aumentó un 49% respecto a las dosis administradas en el mismo periodo del año pasado. «En total, en toda la temporada, hemos administrado casi un 14% más que en la anterior», añade Torres, quien atribuye este incremento al esfuerzo realizado en Atención Primaria y en las escuelas para informar sobre la necesidad de protegerse. De momento, se han vacunado contra la gripe cerca de 225.000 personas en el archipiélago.
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