“No somos vendedores de activos. Queremos ser los titulares a largo plazo. Buscamos las soluciones mejores y más eficaces para aumentar nuestro valor”, afirma Serghei Bulgac, máximo responsable del grupo Digi. Casi 18 años después de entrar en el mercado español, la teleco rumana se prepara para dejar de ser un agitador de precios y consolidarse como operador estructural. La compañía ha logrado consolidarse como la principal operadora de bajo coste del sector y afronta un 2026 clave en su expansión: prepara su salida a bolsa en Madrid con el compromiso de invertir 2.000 millones de euros en su red de fibra óptica española.
En Rumanía, Digi controla tres de cada cuatro conexiones de fibra y es el segundo operador móvil, con una cuota de mercado cercana al 30%. La compañía decidió extender su negocio a España en 2008, aprovechando la rampa de lanzamiento que le ofrecía la comunidad migrante y con una estrategia de precios agresivos.