No fue en el escenario donde se vivió el momento más emocionante del Eras Tour de Taylor Swift. Al menos, no para quienes trabajaron entre bastidores o sobre el escenario con la cantante. Al final de una de las mayores giras de la historia de la música, que recaudó la cifra récord de más de 2.000 millones de dólares en 21 meses, Taylor Swift decidió compartir su éxito con quienes hicieron posible esta extraordinaria hazaña.
Como se ve en la docuserie recién estrenada en Disney+ Taylor Swift: The Eras Tour / The End of an Era, Swift repartió 197 millones de dólares en primas a su equipo. Desde los camioneros hasta los bailarines, pasando por los técnicos de iluminación y sonido, el equipo de vestuario, los peluqueros, los fisioterapeutas, el personal de seguridad y de producción de vídeo, todos recibieron un cheque de agradecimiento, cuyo importe individual, sin embargo, se mantiene en secreto en el documental.
Taylor Swift escribió a mano cada nota – «me llevó semanas», cuenta en la docuserie, “pero me sentí bien haciéndolo”– y se la entregó personalmente a cada colaborador al final de la gira. En las imágenes de la docuserie, la cantante toma la palabra con voz firme pero visiblemente emocionada para contar cómo la experiencia fue «más dura que cualquier cosa que haya hecho nunca en directo» y para agradecer al equipo su entusiasmo, curiosidad y resistencia mostrados escenario tras escenario, país tras país. A continuación, invita a todos a abrir juntos la carta.
Kam, uno de los bailarines, lee en voz alta: “Hemos recorrido el mundo como nos habíamos propuesto. Encantamos al público, pero también echamos de menos a la familia. Mi gratitud no sale toda de un banco, pero aquí (…) dólares sólo para dar las gracias. Con cariño, Taylor”.
La cantidad se mantiene en secreto, pero las reacciones no: manos en la cara, lágrimas, incredulidad. Según algunos medios estadounidenses, la cantidad media de los regalos rondaría los 50.000 dólares por persona, mientras que para los bailarines –según rumores recogidos por Forbes– el bonus alcanzaría los 500.000 dólares. Algunos, como informa The Sun, casi se desmayaron de la emoción al recibirlo. Otros se echaron a llorar, abrumados por un gesto que va más allá del valor económico.
Taylor Swift no es ajena a este tipo de gestos: ya en los primeros tramos estadounidenses de la gira recompensó a los camioneros con cheques de 100.000 dólares a cada uno, reconociendo el papel crucial de quienes son, literalmente, los responsables de poner en marcha la maquinaria del espectáculo. «Si una gira va mejor de lo esperado, los que trabajan deben beneficiarse«, explicó la artista en varias ocasiones.