«El margen de error es cero. Es momento de sacar el carácter». Estas han sido las palabras del entrenador del Casademont Zaragoza, Jesús Ramírez, antes de que su equipo viaje a Turquía para medirse el miércoles al Petkimspor, a la inusual hora de las 16.00, en una nueva jornada de la FIBA Europe Cup. Tras haber perdido la pasada semana en el Príncipe Felipe contra el Peristeri griego (80-92), el equipo zaragozano se encuentra en una situación muy comprometida para continuar en la competición continental.
«Si los partidos de fuera no estamos en disposición de dar un paso adelante, pronto estaremos eliminados. Depende de nosotros mostrar un paso adelante y no repetir lo del miércoles. Volvemos a una situación que ya vivimos en la primera vuelta, la de jugar tres partidos consecutivos fuera de casa», ha afirmado este lunes el entrenador, poco antes de emprender el rumbo hasta el Aliaga Belediyesi Enka Arena.
Ramírez ha insistido en la necesidad de viajar a la sede del Petkim «con los mejores jugadores posibles para ganar este partido y los descartes serán por rendimiento«, después de que el staff rojillo haya sido criticado por la confección de algunas de sus convocatorias anteriores.
Sobre el rival otomano, el entrenador del Casademont ha analizado que es un equipo clásico, de los de antes, por lo que los rojillos procurarán elevar el ritmo y jugar a muchas posesiones. «Venimos de preparar un partido con un rival con mucho ritmo e intensidad y ahora nos espera todo lo contrario. Jugadores con mucha experiencia, son el mejor equipo en pick and roll, son buenos en continuidad», ha explicado. «Otra vez está en nosotros intentar ganar el partido desde la defensa. Si el partido es de muchas posesiones, irá en nuestra dirección».
En su último compromiso europeo, el Petkimspor sorprendió a domicilio al Dinamo Sassari (72-76), tras facturar 27 puntos en el último cuarto. El Casademont, por su parte, cayó estrepitosamente en casa contra el Peristeri, que este pasado fin de semana ha perdido contra Olympiacos por la friolera de 43 puntos (62-105).
En su comparecencia ante los medios de este lunes, Ramírez también ha afirmado que no sabe cuándo se podrá disputar el partido aplazado el domingo por la alerta roja de Valencia, dado que los calendarios de los dos equipos están colapsados. «Fue una pena no poder jugar, era un día bonito con los dos partidos allí; me hubiera gustado ver toda la gente de Zaragoza allí, pero por seguridad no ha podido ser. Espero que se pueda dar la opción de volver a coincidir los dos equipos», ha afirmado.