La icónica estatua de Rocky Balboa, uno de los símbolos más reconocibles de la saga cinematográfica, volverá a ocupar el lugar que la convirtió en un emblema mundial del cine y, sobre todo, de la ciudad de Filadelfia.

El pasado miércoles se aprobó de forma preliminar el traslado de la estatua a la parte superior de las escaleras del Museo de Arte de Filadelfia, el mismo lugar donde el personaje interpretado por Sylvester Stallone culmina su famoso entrenamiento en la licencia original de Rocky.

La estatua fue creada en 1980 para Rocky III y, desde entonces, ha tenido varios emplazamientos en la ciudad. Actualmente se encuentra a nivel de calle, junto a las escaleras del museo, pero el nuevo plan contempla un recorrido previo dentro del museo antes de instalarla de forma definitiva en la cima de la escalinata.

Según lo acordado, la estatua permanecerá en exhibición dentro del museo durante la primavera y el verano de 2026, para después trasladarse de manera permanente a su ubicación histórica.

Creative Philadelphia, el organismo municipal encargado del arte público, descartó una propuesta anterior que planteaba entregar la estatua original a Sylvester Stallone y colocar un molde diferente en las escaleras. Cabe recordar que existe otra estatua idéntica, realizada con el mismo molde, que se encuentra en el aeropuerto de Filadelfia.

Desde su primera instalación frente al museo, la estatua ha generado debate y polémica. Parte del mundo del arte consideró durante años que se trataba únicamente de una pieza de utilería cinematográfica, inapropiada para una institución que alberga obras de artistas como Picasso. Sin embargo, esas críticas nunca han frenado su atractivo: millones de turistas hacen fila cada año para fotografiarse con Rocky.

La alcaldesa Cherelle Parker destacó que la estatua se ha convertido “en una piedra de toque cultural” que refleja los valores, la determinación y el espíritu de Filadelfia.