Toni Nadal desveló este jueves en El Larguero que durante toda su etapa como entrenador de su sobrino Rafa Nadal «no cobraba» por sus servicios profesionales. La confesión llegó mientras el expreparador analizaba la inesperada ruptura entre Carlos Alcaraz y Juan Carlos Ferrero, una separación que ha sacudido el mundo del tenis en 2025 y cuyas causas reales permanecen en el misterio pese a los comunicados publicados en redes sociales.
El preparador mallorquín explicó que su peculiar situación contractual le otorgaba una libertad total para exigir y corregir sin temor a consecuencias. «El que paga manda. Como nunca he cobrado nada como entrenador de Rafa, le podía decir lo que quería», afirmó Toni Nadal durante su intervención radiofónica. Esta circunstancia, lejos de ser una debilidad, se convirtió en una fortaleza que permitió al técnico mantener una posición de autoridad moral incuestionable frente a su pupilo durante más de dos décadas de colaboración.
La anécdota más reveladora llegó cuando Manu Carreño, conductor del programa, señaló que le había salido muy barato a Rafa Nadal tener a su tío como entrenador. Toni Nadal respondió entre risas: «Por eso estuve tanto tiempo. Nosotros somos medio catalanes. Rafael decía ‘por lo que cobra mi tío, que siga'». Esta declaración con tono humorístico refleja la relación especial entre tío y sobrino, donde los vínculos familiares prevalecieron sobre las consideraciones puramente económicas durante años de éxitos compartidos.
Toni Nadal profundizó en las ventajas que le proporcionaba esta situación laboral atípica en el circuito profesional del tenis. El preparador considera que «los tenistas necesitan alguien que les diga las cosas que otros no se atreven a decirles». Esta franqueza absoluta, según su criterio, resulta fundamental para el desarrollo del deportista, especialmente cuando alcanza la élite mundial y se rodea de personas que tienden a evitar los conflictos o las críticas directas.
Respecto a la separación entre Carlos Alcaraz y Juan Carlos Ferrero, Toni Nadal descartó motivos deportivos: «El problema no es tenístico porque los resultados han sido impecables». El murciano ha conquistado múltiples títulos bajo la dirección de Ferrero, incluyendo varios Grand Slam, lo que hace aún más sorprendente esta ruptura inesperada que ha generado todo tipo de especulaciones en el entorno del tenis mundial.
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