El Joventut de Badalona está viviendo un gran momento deportivo e institucional. Entre otras razones, el retorno a casa del hijo pródigo, Ricky Rubio, es una de las razones de la felicidad de sus aficionados, que además está significando la cosecha de buenos resultados tanto en ACB como en la Basketball Champions League.

Sin embargo, no todo son buenas noticias para el equipo de Dani Miret. Sam Dekker, una de las fichas más altas de la plantilla, no está encajando como se esperaba. El jugador llegó a Badalona la pasada temporada, en noviembre del 2024. Su rendimiento superó todas las expectativas, y en Badalona estaban muy contentos con la aportación del alero. Además, su relación con los aficionados del Olímpic parecía idónea.

Pero en la presente temporada, nada está yendo como se esperaba. El club hizo un gran esfuerzo para poder retenerle, ya que sus derechos pertenecían a su anterior club, London Lions. Fichajes importantes como los de Ricky o Cameron Hunt, le han restado importancia en ataque a un jugador que era clave en la pizarra de Miret.

Ahora la situación ya es realmente difícil. Su minutaje se ha reducido hasta tal punto, que en los últimos seis encuentros ni tan solo ha saltado a la cancha. Incluso, se ha llegado a especular con la opción de no volver a vestir más la camiseta verdinegra, según apuntó el periodista Xavi Ballesteros. Se desconoce si ha habido algún problema extradeportivo, o todas las causas tienen que ver directamente con el juego.

Según el portal ‘SoloBasket’, el Covirán Granada tiene cierto interés en la situación del jugador, y está pendiente a si hay alguna opción de hacerse con los servicios del jugador. En cualquier caso, no será fácil por el elevado salario con el que cuenta Dekker en el Joventut.