Aunque no luzca el brazalete de capitán en el terreno de juego, en Villarreal, por ejemplo, lo llevó Frenkie de Jong, lo cierto es que Raphinha ejerce de líder en el campo. Lo ha mostrado en multitud de ocasiones. Viral fue su imagen en el banquillo consolando a Hansi Flick a la conclusión del partido que el Barça jugó ante el Alavés y en el que los azulgranas acabaron pidiendo la hora.

En Villarreal, Raphinha volvió a ser importante para el equipo. Provocó el penalti que él mismo transformó y que significó el único gol del partido. Poco después, estrelló un balón en la madera con un gran disparo desde fuera del área. El brasileño, como siempre, también se aplicó en defensa y ejerció de líder cuando el Villarreal apretó y creó oportunidades de gol, especialmente en la primera mitad.

Unas imágenes de Movistar muestran las palabras que tuvo con Pau Cubarsí tras una pérdida de balón del central que provocó que el equipo local estuviese cerca del gol. Cuando llegó al área para defender el saque de esquina, no dudó en gritarle. «No hace falta jugar bonito siempre«, le dijo. Aceptó esas palabras el central catalán, que sabe que Raphinha es una extensión de Flick en el campo y que lo da todo por el bien del colectivo.