Los casos de gripe van creciendo y la campaña de vacunación iniciada en octubre deja, en puertas de los encuentros navideños que acelerarán la circulación … del virus, casi 700.000 personas vacunadas en Castilla y León (690.463, a fecha del 15 de diciembre, último dato oficial publicado por la Junta), lo que sitúa el porcentaje de población protegida en el 28,9% si se toma en cuenta el padrón total de habitantes. Si se baja al detalle, entre los mayores de 60 años esa protección que ofrece la vacuna fluctúa entre el 55% de León y el 65% de Soria. Y entre los niños de menos de nueve años, que entran en los grupos de vacunación preferente, la inmunización presenta coberturas de más de 54% en Valladolid o Salamanca y apenas supera el 41% en Burgos, según recoge el balance oficial de la campaña de vacunación.

Grupos preferentes

5.969 mujeres embarazadas han recibido la vacuna antigripal esta campaña en Castilla y León

La ampliación de la horquilla de edad de los menores a los que se recomienda la vacunación antigripal ha sido una de las novedades de esta campaña. Las sociedades estatales de vacunólogos, infectólogos y pediatras apuntaban este otoño a la necesidad de llegar a los 17 años. El último dato que ofrece la Consejería de Sanidad cifra en 50.053 los niños de entre seis meses y 9 años que han recibido la vacuna, que en su caso ha sido intranasal y sin pinchazo. 13.036 de ellos residen en Valladolid, a los que se suman otros 3.055 chavales de 9 a 15 años en los que era aconsejable la vacuna por contar con algún problema de salud o convivir con personas para las que contraer una infección gripal supone un riesgo grave.

Los profesionales destacan que la gripe sigue siendo una de las infecciones respiratorias que más afecta a la población pediátrica. En la mayor parte de los casos, con síntomas leves o moderados, lo que no resta repercusión en la sobrecarga de las consultas médicas, en el absentismo escolar y también en las hospitalizaciones cuando los cuadros se agravan o el niño tiene otros problemas de salud de base.

Potencian el efecto contagiador

La inmadurez del sistema inmunológico hace a los menores más proclives a contraer la gripe y a la vez se les ha catalogado como un motor en la transmisión del virus, porque lo eliminan de forma más prolongadas y en concentraciones más elevadas que los adultos y eso facilitar una propagación que en épocas normales se centran en centros educativos y la familia más cercana y en tiempos navideños se amplía a la familia extensa con las comidas y cenas o a los abuelos que participan en su cuidado durante las vacaciones.

Fiebre, tos, dolor de garganta y malestar general son los síntomas que provoca la gripe en niños cuando cursa de forma leve o moderada. A eso se pueden sumar otitis, sobre todo en menos de 2 años, riesgo de deshidratación, neumonía o agravamientos de otras enfermedades crónica en menores con asma, inmunodeficiencias o cardiopatías, entre otras patologías.

El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, recomendaba este lunes el uso de mascarilla a aquellas personas que tengan síntomas como tos o congestión nasal o fiebre, una medida de protección que extendía como precaución para evitar contagios a quienes mantienen contacto con ciudadanos con una salud vulnerable por edad o por lidiar con patologías graves.

Octogenarios y más, a la cabeza

En el otro extremo de la pirámide demográfica están los octogenarios, nonagenarios y centenarios. Son el grupo de edad con más integrantes vacunados: 179.900 en Castilla y León, a fecha de 15 de diciembre, de los que 109.047 son mujeres y 70.859, hombres, atendiendo a la mayor esperanza de vida de las primeras.

Otro de los colectivos de vacunación preferente son las embarazadas. El registro de dosis administradas arroja que 5.969 mujeres gestantes se han vacunado en Castilla y León esta campaña.