El derbi canario del próximo domingo entre el Dreamland Gran Canaria y La Laguna Tenerife, en territorio tinerfeño, ofrece entre otros atractivos el duelo directo entre dos de los bases más experimentados y con calidad de toda la ACB. El francés Andrew Albicy, en el bando claretiano, y el brasileño Marcelinho Huertas en el canarista. Ambos son la extensión en la pista de sus respectivos entrenadores, Lakovic y Vidorreta.
A sus 42 años, el jugón aurinegro está viviendo una segunda juventud tras su paso por equipos de primer nivel de la Liga Endesa: Joventut, Bilbao, Baskonia y Barça. Recalaba en la isla vecina en la campaña 2020-21 y su llegada a la entidad lagunera coincidió con el despegue de un Canarias que hasta ese momento había sido el equipo segundón del Archipiélago, siempre a la sombra del Granca.
Su conexión con otro ilustre, Gio Shermadini, ha sido una de las claves del crecimiento exponencial de un equipo que se ha quitado los complejos para competir de tú a tú con los grandes de la ACB, aunque precisamente la veteranía de su plantel quizás le ha pasado factura a los tinerfeños a la hora de pelear por los grandes títulos.
Huertas se convierte en el termómetro de un La Laguna Tenerife que parece que le tiene comida la moral a los claretianos en los últimos tiempos, como demuestra el balance de 14-2 favorable a los aurinegros en sus últimos 16 cruces.
Una visión de juego única
El director de orquesta del Canarias destaca por su visión de juego, su capacidad para hacer pases imposibles y para asumir un rol protagonista en el apartado anotador. Su 16,7 de valoración le colocan como el segundo mejor valorado de su equipo, siendo el máximo anotador (16,2 puntos) y asistente (6,2 pases de canasta).
Enfrente de Huertas estará una temporada más uno de los jugadores con más carisma y peso de la plantilla del Granca en los últimos tiempos. Un Andrew Albicy que a sus 35 años cerraba hace unas semanas su etapa en la selección francesa, con la que logró una doble plata olímpica.
Sexto curso de amarillo
El base de los amarillos cumple su sexta temporada en la Isla, a la que llegaba procedente del Morabanc Andorra para recuperar la estirpe de los antiguos capitanes y liderar a un Gran Canaria que bajo su mando consiguió por primera vez convertirse en campeón de la Eurocup. En lo estadístico, el peso del galo en el equipo quizás no tiene la trascendencia de Huertas en el conjunto lagunero.
Si algo destaca en Albicy es su espíritu de sacrificio y lucha. Un perro de presa en defensa y, a pesar de no ser un consumado anotador como su compañero de posición, no duda en dar un paso al frente cuando la situación lo requiere y asume la responsabilidad.
Dos directores de juego antagónicos, pero que con sus defectos y virtudes lideran a sus respectivos equipos. Seguro que volverán a hacerlo en el derbi canario del domingo, que puede ser la última oportunidad para los claretianos de seguir soñando con una Copa del Rey para la que los tinerfeños ya tienen su billete sellado . ¿Podrá en esta ocasión Albicy parar a Huertas?
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