Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 1 de 23© Stephane Aboudaram

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 2 de 23Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Fotografía exteriorComplejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 4 de 23Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Fotografía exterior, VidrioComplejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Más Imágenes+ 18

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  • Área
    Área del proyecto de arquitectura

    Área: 
    2360

  • Año
    Año del Proyecto de arquitectura

    Año: 


    2025

  • Fotógrafos

  • Proveedores
    Marcas y productos usados en este proyecto de arquitectura

    Proveedores:  Arcelor Mittal, Jousselin, LEC , MALERBA, NOUANSPORT, Schüco, Selux, diamond

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 2 de 23© Julien Tragin

Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto se encuentra en el Quartier de la Piscine, en Petit-Quevilly, al sur del área metropolitana de Ruan. Situado en un antiguo emplazamiento industrial, el terreno se encuentra en el corazón de un territorio fragmentado, dividido por la autopista Sud III, que durante mucho tiempo ha interrumpido la continuidad urbana entre el centro histórico y los barrios del este. Hasta hace poco, el lugar se percibía como un conjunto dispar: zonas de estacionamiento al norte, una sala de calderas urbana en el centro, instalaciones públicas dispersas al sur, todo ello rodeado por una serie de barreras físicas (cercas y redes de protección) que acentuaban la fragmentación del espacio.

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 6 de 23© Stephane AboudaramComplejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Fotografía exterior© Julien Tragin

Un terraplén de tierra, construido para proteger el lugar de las molestias de la autopista, reforzó paradójicamente esta ruptura visual y física. El proyecto nació de un simple deseo: volver a conectar. Reconectar a los residentes con su ciudad, reconectar los barrios divididos por las infraestructuras, reconectar las prácticas deportivas y culturales con el paisaje circundante. Como parte del Programa Nacional de Renovación Urbana (ANRU), el proyecto ofrecía una gran oportunidad para reunificar el municipio en torno a un gran parque público federador.

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 20 de 23Plan – Terreno

En este antiguo emplazamiento industrial de tres hectáreas, antes fragmentado y cerrado, el proyecto conforma ahora un vasto espacio público donde convergen la arquitectura y la naturaleza. En el centro del proyecto, un paseo mirador de 365 metros de longitud traza una línea clara a través del paisaje. A veces a nivel del suelo, a veces elevada, esta columna vertebral lineal actúa como una interfaz que conecta todos los elementos del programa —gimnasio polideportivo, instalaciones sociales, centro de ocio, skatepark y estadio municipal— al tiempo que ofrece nuevas perspectivas sobre la ciudad. Más allá del programa inicial, propusimos un skatepark de hormigón, una cancha de baloncesto en la azotea del gimnasio y la integración lúdica de toboganes en las pendientes naturales del terreno.

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 12 de 23© Julien Tragin

La pasarela urbana se convierte en la columna vertebral del proyecto: un gesto sencillo pero poderoso que conecta y revela. A su alrededor, el parque se despliega como un paisaje vivo y en constante evolución. Las laderas están esculpidas, el agua de lluvia se canaliza a través de zanjas ajardinadas, y los prados y bosquecillos se suceden en secuencias naturales. El conjunto forma un entorno acogedor, propicio para los usos cotidianos, el ocio y la vida social: un espacio abierto y accesible para todos, donde se unen el deporte, naturaleza y ciudad.

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 21 de 23Cortes

El sistema estructural, realizado íntegramente en hormigón, afirma un enfoque unitario que cumple con los requisitos de control de costos, durabilidad y coherencia arquitectónica. Anclados en la ladera, el gimnasio y las instalaciones sociales se abren ampliamente a los espacios exteriores, estableciendo un diálogo continuo entre la arquitectura y el paisaje. Debajo de la rampa circular que estructura el corazón del proyecto, el centro de ocio para adolescentes encuentra naturalmente su lugar. Aquí, la arquitectura define los límites del patio interior y del skatepark al oeste, articulando los usos y fomentando la interacción dentro de un espacio compartido. Partiendo de este punto central y en continuidad directa con la rampa circular, el puente metropolitano proporciona una conexión directa con el distrito del Ayuntamiento, uniendo el Sud III y las líneas ferroviarias.

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 4 de 23© Stephane AboudaramComplejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Imagen 9 de 23© Stephane Aboudaram

El proyecto se refuerza mediante un sutil, duradero y casi monolítico lenguaje arquitectónico. Todas las fachadas se tratan de manera uniforme: un revestimiento metálico envuelto por una piel secundaria de rejilla metálica envuelve los edificios. Este tratamiento de un solo material otorga al conjunto una homogeneidad casi abstracta, al tiempo que modula la luz y protege las superficies acristaladas de daños. La arquitectura actúa como un lazo urbano, reconectando las partes fragmentadas del territorio y brindando al vecindario un nuevo respiro. Hoy, el proyecto se presenta como un paisaje para habitar, recorrer y compartir – un proyecto en la encrucijada de la arquitectura, el diseño urbano, la ingeniería civil y la arquitectura paisajística, que ofrece al distrito un renovado sentido de apertura.

Complejo deportivo en Petit-Quevilly / Olgga Architects - Fotografía exterior, Vidrio© Stephane Aboudaram