La temporada del PGA Tour encara a partir de este jueves su recta final. Arranca el FedEx St. Jude Championship, primero de los tres torneos que van a decidir el campeón de la FedEx Cup 2025.
Son tres eventos diferentes, el St. Jude de esta semana, el BMW Championship de la próxima y el Tour Championship de dentro de dos semanas, los que van a decidir la victoria de la temporada anual del circuito. Será el ganador del Tour Championship quien se haga con el título del circuito. Por otra parte, este playoff del PGA Tour está colocado semanas antes de la Ryder Cup.
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Lluís Carles Pérez
Los puntos para los ganadores de estos torneos se cuadriplican con respecto a los torneos regulares de la temporada, por lo que se reparten 2000 para los ganadores en los dos primeros eventos, antes de que el Tour Championship decida el campeón. Además, los distintos torneos, que se juegan sin corte, son eliminatorios: de los setenta participantes en St. Jude, tan solo los cincuenta mejores en la clasificación anual pasarán al BMW. Tras él, el corte será de treinta para el Tour Championship final.
Para decidir al campeón de la FedEx Cup se tendrá en cuenta el vencedor de ese último torneo. Pero, para ello, como novedad esta temporada, los marcadores de inicio de los jugadores en él no tendrán en cuenta la clasificación anual del circuito. Todos arrancarán con el par del campo.
De esta manera, un total de setenta jugadores, los mejores de la campaña en la FedEx Cup, han obtenido billete para un FedEx St. Jude que se juega en el TPC Southwind de Memphis este fin de semana. En él, todas las miradas van a estar centradas en un hombre: Scottie Scheffler. El estadounidense, gran favorito a la victoria final de la temporada, llega a este torneo como sólido líder de la clasificación anual y en un momento de forma pletórico.
Flamante campeón del British Open hace poco menos de tres semanas, Scheffler reaparece con todos los focos puestos sobre su figura. No en vano ha ganado cuatro de los últimos ocho torneos que ha disputado y no sale del top10 desde The Players, disputado en marzo. Una muestra de regularidad absoluta.
Por si fuera poco, busca su segunda FedEx Cup consecutiva, un hito que nadie ha logrado desde la puesta en marcha del formato en el año 2007. Sería un hito más para un jugador que sigue escribiendo el presente del golf, con dos ‘majors’ (también ganó el PGA Championship) y con cuatro triunfos este año y lanzado para llegar a pleno rendimiento a la Ryder de dentro de unas semanas.
Además, Scheffler (4806 puntos en la tabla) no va a contar en el torneo inicial con la presencia de su mayor rival en la lucha por la FedEx Cup, Rory McIlroy (3444), lo que reafirma su favoritismo para este primer torneo. Estadounidense y norirlandés tienen muy encarrilados los dos primeros puestos del ranking anual antes del torneo final, situación que ha llevado a un McIlroy cansado por el calendario a reservar energías de cara a las dos próximas semanas.
De esta manera, los mayores rivales de inicio para Scheffler en el primer torneo son Sepp Straka (2595 puntos), Russell Henley (2391) y Justin Thomas (2280). El número uno del mundo opta a dar el pase definitivo para alejar a todos sus rivales a más de dos mil puntos antes del BMW Championship y, con ello, atar esa primera posición de cara al evento final.
Eso sí, no van a faltar otros grandes nombres. J. J. Spaun, Tommy Fleetwood, Viktor Hovland, Collin Morikawa, Xander Schauffele, Justin Rose o Hideki Matsuyama son, entre otros y más allá de la clasificación anual, candidatos a hacerse con la victoria en este primer torneo. Jugadores como Matthew Fitzpatrick, Schauffele o Jordan Spieth llegan al límite de las posiciones de top50 que dan acceso al BMW Championship, por lo que hay mucho en juego a partir de esta semana.