El municipio vascofrancés de Bidart fumigará esta madrugada el centro del pueblo para tratar de acabar con el mosquito tigre después de que las autoridades … sanitarias de Iparralde hayan detectado un segundo caso de un arbovirus que transmite el mosquito tigre, y que podría ser un nuevo caso de chikungunya tras el detectado hace dos semanas en Hendaia. La fumigación ha sido anunciada por el Ayuntamiento de Bidart después de que la Agencia Regional de Salud (ARS) informara de que una persona infectada con un arbovirus autóctono –una enfermedad viral similar al dengue, la chikunguña o el zika, transmitida por el mosquito tigre– visitó recientemente Bidart.
Se trata de un caso autóctono, lo que significa que el virus se transmitió sin que la persona afectada haya viajado a una zona catalogada como contaminada.
Ante el riesgo de propagación del virus, el consistorio ha planificado fumigar con insecticidas varias zonas del centro de la ciudad durante la noche del viernes al sábado. «El tratamiento con insecticidas se realizará durante la noche del viernes 8 al sábado 9 de agosto a las 3.00 h, con una duración aproximada de una hora», ha explicado Emmanuel Alzuri, alcalde de Bidart, en un comunicado de prensa. Las zonas afectadas son la plaza Sauveur-Atchoarena, el aparcamiento de la iglesia, el aparcamiento del lavadero, la calle Erretegia, el impasse Harreguy, la calle de la Madeleine, la avenida de la Grande Plage y la avenida de Chabadenia.
Según informa Sud Ouest, el método de tratamiento y las zonas afectadas han sido definidos por el ARS. «El objetivo es evitar que los mosquitos tigre presentes piquen a la persona enferma y transmitan la enfermedad a otras personas cercanas. Dado que el mosquito tigre vive en un radio de 150 metros, las operaciones de control de mosquitos necesarias para limitar el riesgo de epidemia son muy locales», indica la organización de salud pública.
Antes de la fumigación con insecticidas, se ha recomendado a la población retirar la ropa, los juguetes o los alimentos que pueda haber en el exterior y alejar o meter a los animales dentro de las viviendas. Durante el tratamiento, se deben cerrar las ventanas que dan a la vía pública y no se recomienda permanecer cerca del equipo. Finalmente, después del tratamiento, es necesario enjuagar los muebles de jardín y los objetos que se hayan dejado en el exterior.
Un precedente en Hendaia
El caso de Bidart se suma un primer caso de chikungunya detectado en Hendaia el 31 de julio. En aquella ocasión, el afectado fue un vecino de Hendaia que, según la información publicada por medios franceses, no había viajado a zonas contaminadas en los últimos 15 días. Por lo tanto, se le registró como el primer caso autóctono de la enfermedad.
Sin embargo, el infectado declaró haberse desplazado a San Sebastián en las dos semanas previas por motivos profesionales, lo que llevó al Departamento vasco de Salud a activar la alerta y pedir a los ayuntamientos de la comarca de Bidasoa, así como a otros consistorios del este del territorio como Lezo, Pasaia, Errenteria o Donostia, reforzar las medidas de vigilancia y control del mosquito tigre. Pello Latasa, responsable de vigilancia epidemiológica del Departamento de Salud, adelantó en este periódico que existían «muchas probabilidades de que aparezcan más casos, ya sea a uno u otro lado de la muga».