Si los benalmadenses se preparan para decir «hola» a Tivoli, ahora deberán hacerlo para decir «adiós» a su icónica plaza de toros. Al menos es … lo que debería ocurrir a la vista de informe técnico de la Diputación Provincial de Málaga, al que ha tenido acceso SUR, que defiende que el coso de Benalmádena debe demolerse. El documento, firmado por un doctor en Ingeniería Industrial e ingeniero de Caminos, Canales y Puertos adscrito al Servicio de Arquitectura, Urbanismo e Información Territorial de la Diputación, sostiene que el estado en el que se encuentra esta construcción de titularidad municipal conduce a un único camino: «la declaración de la situación de ruina urbanística». El técnico considera que las patologías que presenta el inmueble, ubicado en Benalmádena Pueblo y que fue inaugurado el 24 de febrero de 1968, hacen que sea «procedente la demolición de la edificación actual».
De momento, el Ayuntamiento se resiste a asumir las conclusiones del informe técnico. Preguntado por SUR, un portavoz autorizado del equipo de gobierno ha asegurado que se están estudiando «las diferentes vías» y que «no hay nada decidido aún».
En 2011 un informe del arquitecto municipal ya defendía que el coso estaba en una situación de ruina urbanística
El informe del técnico de la Diputación no es el primero que sostiene que el edificio se encuentra en una situación legal de ruina urbanística. En 2011, hace ya catorce años, el arquitecto municipal ya llegó a la misma conclusión. En febrero de este año, el Ayuntamiento decidió solicitar el informe a la Diputación a instancias de la Asociación Cultural Taurina de Benalmádena, una entidad creada apenas un año antes por aficionados a la tauromaquia de la localidad que no terminaba de creerse las conclusiones a las que había llegado el arquitecto municipal. Posteriormente, el Grupo Municipal VOX presentaba una moción con el fin de que el Pleno acordara «la rehabilitación integral» de la plaza de toros para que pudiera albergar «ferias taurinas, campeonatos y exhibiciones de animales de animales», además de «los nuevos usos culturales que pudiera acoger». La propuesta quedó sobre la mesa a la espera de las conclusiones de los técnicos de Diputación, y no será hasta la próxima sesión plenaria, que se celebrará el próximo día 12, cuando se debata.
Estado que presente el interior del inmueble municipal.
SUR
Cimentación «deficiente», fisuras, corrosión…
Cuando llegue el Pleno —y los grupos políticos fijen su postura— sobre la mesa estará el contundente informe de este técnico en el que sostiene que se dan las circunstancias que especifica el apartado «a» del artículo 146.1 de la Ley 7/2021, de impulso para la sostenibilidad del territorio de Andalucía (LISTA), que establece que «procederá la declaración legal de la situación de ruina urbanística» cuando «el coste de las reparaciones necesarias para devolver la estabilidad, seguridad, estanqueidad y consolidación estructural a la construcción o edificación que esté en situación de manifiesto deterioro supere el límite del deber normal de conservación».
El técnico asegura que el daño en los pórticos que soportan el tendido afecta a su resistencia y a la seguridad de la estructura
El informe del técnico de la Diputación Provincial apunta a un «estado avanzado de carbonatación de los pórticos de hormigón que soportan el forjado de las gradas (tendido)», que ha oxidado las armaduras, rebajando su sección, y «disminuyendo, por lo tanto, su capacidad de resistencia y la seguridad de la estructura». Además, el documento advierte de «fisuras en los parámetros exteriores» y «una cimentación deficiente para este tipo de terrenos», además de una «ausencia de impermeabilización en los forjados» del tendido que ha provocado la presencia de agua y ha producido «corrosión y oxidación de las armaduras».
Además, el documento avisa de la existencia de una instalaciones «de salubridad inadecuadas y deterioradas»; de la falta de protección contra incendios; de una instalación eléctrica «casi inutilizable»; y de otros incumplimientos de la normativa como la presencia de barreras arquitectónicas, la falta de itinerarios accesibles o la dotación de aseos, entre otras cuestiones.