La tauromaquia resurge con fuerza en Mallorca. Las grandes entradas registradas en los dos festejos celebrados durante esta semana en la Isla, el pasado domingo en la Plaza de Toros de Inca y anteayer en el Coliseo Balear, reflejan que la afición taurina goza de buena salud y que, cuando hay corridas de toros, responden con su afluencia. Y el próximo mes de septiembre está previsto que La Monumental de Muro, un coso con 115 años de historia y una gran tradición taurina, organice un evento tras ocho años sin toros.

Después de estas dos corridas en la Isla en apenas cuatro días, los empresarios de Inca y Palma han confirmado a Ultima Hora sus intenciones, que pasan por ampliar para el próximo año 2026 el número de festejos, que pasarán de los dos o tres de esta temporada a entre ocho y diez. Han detectado que la afición por esta fiesta en la Isla está en crecimiento y apuntan que han llegado para quedarse.
El crítico mallorquín e influyente en tauromaquia David Devis califica de «especial» los acontecimientos vividos en Inca y en el Coliseo Balear.

«La tauromaquia en Baleares vive un momento de auge. En apenas una semana, dos llenos históricos han sacudido la isla: primero, la plaza de toros de Inca; después, el Coliseo Balear de Palma, abarrotado hasta la bandera», apunta David.
«En una comunidad -continúa el influyente taurino- donde hace pocos años se hablaba de prohibiciones y restricciones, ver a públicos de todas las edades ocupar los tendidos demuestra que la afición no solo resiste, sino que se renueva. Familias, jóvenes y veteranos comparten grada y pasión, en un gesto que es tanto cultural como reivindicativo», subraya antes de finalizar con un mensaje claro: «Inca y Palma han dejado claro que la tauromaquia, lejos de apagarse, sigue latiendo con fuerza en el corazón de muchos baleares».

El empresario Jorge Matilla, que regenta la plaza de toros de Palma, también se mostró muy satisfecho de la respuesta de la afición a la corrida del pasado jueves en el Coliseo con Morante de la Puebla, Sebastián Castella y José Mari Manzanares: «La asistencia fue extraordinaria, con más espectadores que en las últimas celebradas aquí. Estoy muy agradecido tanto a las tres figuras del toreo, como a los medios de comunicación por todo el apoyo demostrado y especialmente a los aficionados que demostraron que quieren festejos».
Matilla también adelantó que ya está trabajando para celebrar más espectáculos taurinos en el Coliseo Balear el próximo año: «El hecho de que los menores puedan asistir ha cambiado la situación y la perspectiva. Los niños y los jóvenes se han volcado para poder asistir a los toros y estoy muy satisfecho de que se pueda educar a la juventud en esta cultura tan bonita. El próximo año habrá más corridas de toros, aunque ahora mismo no puedo decir cuántas porque hay que ajustar temas de calendario. Pero estamos muy satisfechos de la respuesta y queremos ampliar el número de festejos. Hay mucha afición en la Isla y muy buenos y entendidos de la fiesta. Palma se merece más y nuestra intención es dar realce».
También Jorge Conde, representante de la empresa que dirige Francisco D’Agostino con Javier Conde como gerente y que dirige las plazas de Inca y que próximamente administrará la de Muro, está feliz con la respuesta del público mallorquín y en el horizonte de 2026 prevé más festejos. «Nuestra intención es clara y abierta. El próximo año queremos celebrar 3 festejos en Inca y 3 en Muro y convertir la Isla en una plaza de temporada. Queremos es darle continuidad a la fiesta en una Isla tan taurina como Mallorca y con cinco plazas, tres de ellas abiertas y nosotros gestionamos dos. El próximo 14 de septiembre tenemos previsto celebrar un festejo en Muro, sin toros desde hace ocho años. El cartel está prácticamente cerrado y pronto lo anunciaremos oficialmente. La idea es consolidar una programación continua, no hacer eventos puntuales», subraya Jorge Conde, que cifra en unos 15.000 los aficionados mallorquines a los toros «y nos debemos a ellos».
El empresario quiso ensalzar la numerosa presencia de público juvenil en las dos corridas celebradas este año en Inca. «Es una con una historia y un potencial enormes, y queremos estar a la altura. Los jóvenes quieren seguir con esta tradición y en este sentido la fiesta en la Isla se encuentra en un gran momento».
Conde se encuentra muy ilusionado con la reapertura de la plaza de toros de Muro, con una capacidad para unos 4.000 espectadores. «Es una plaza muy coqueta que lógicamente necesita unos retoques, pero está totalmente preparada para una corrida de toros de nivel». La tauromaquia irrumpe con fuerza en la Isla.