Un joven de 22 años ha muerto electrocutado este sábado en Zaragoza mientras limpiaba una campana extractora del restaurante en el que trabajaba.

Según han informado desde Policía Nacional, el joven se encontraba manipulando la campana en el restaurante El Casero, en el barrio de Las Fuentes, en Zaragoza, cuando ha sufrido el fatal accidente.

El 091 ha recibido el aviso hacia las 12.30. Cuando han llegado los agentes, el empleado estaba inconsciente, lo que ha llevado a solicitar rápidamente una ambulancia medicalizada. No obstante, cuando los facultativos han intentado reanimarle ya nada han podido hacer por su vida.

Concentración contra la siniestralidad laboral en Zaragoza

Hasta el lugar ha acudido también una inspectora de trabajo de guardia.

Tanto UGT como CCOO han lamentado este nuevo accidente mortal, el sexto en poco más de una semana y el número 25 de este 2025.

«Desde CCOO Aragón mostramos nuestras condolencias por esta muerte y nuestra solidaridad con la familia, amigos y compañeros de la víctima. A la espera de una investigación más exhaustiva por parte de las autoridades competentes, presumiblemente ha habido un fallo en la seguridad eléctrica de la instalación. A partir de dicha investigación deberán establecerse las causas y las responsabilidades», ha apuntado Luis Clarimín, secretario de Salud Laboral y Sostenibilidad de CCOO Aragón.

«No nos quedan más palabras para lamentar las muertes. Hay que buscar soluciones inmediatas, que las administraciones pongan en marcha planes específicos, que se incrementen las inspecciones y que se sancione a los culpables cuando las investigaciones demuestren que habido negligencia en la prevención», ha agregado a través de un comunicado.

Desde la Unión General de Trabajadores, por su parte, han querido trasladar todo su apoyo a los compañeros y familiares del trabajador fallecido. «Reclamamos el cumplimiento de la ley de prevención y la formación adecuada para todos los trabajadores,relativa a los riesgos a los que están expuestos y el máximo rigor en el cumplimiento de la ley de Prevención. Nadie debería morir en el trabajo. Ni una muerte más», ha dicho el secretario de Política Sindical y Salud Laboral de UGT Aragón, José de las Morenas.

Hasta ahora eran cinco las personas que habían perdido la vida mientras trabajaban en poco más de una semana. La última víctima era un trabajador de 56 años de la empresa Magaiz. El fatal incidente se produjo en la calle de Daroca mientras reparaba un elevacoches.

Pocas horas antes, un hombre de 44 años, de origen marroquí, sufrió un trágico accidente en las instalaciones de Saica en El Burgo de Ebro. Se encontraba limpiando un depósito cuando perdió el control de la manguera, que comenzó a chocar contra las paredes y atacó directamente al trabajador, arrancándole un brazo y sufriendo hemorragias que terminaron siendo mortales.

El pasado 30 de julio, dos mecánicos murieron electrocutados en Calatayud cuando tuvieron un fatal contacto con la red eléctrica. Y horas después, un camionero fallecía a causa de un accidente de tráfico en plena madrugada, en la N-122 a su paso por Torrellas, cerca de Tarazona.