Varios incendios forestales mantienen en alerta este fin de semana a Galicia, Comunidad de Madrid o Castilla y León, donde cientos de bomberos luchan, en plena de ola de calor, para controlar las llamas.

En una jornada extremadamente calurosa, con 13 comunidades en alerta por altas temperaturas, las miradas se centran también en el incendio de Chandrexa de Queixa (Ourense), que es ya el incendio más grave de este verano en Galicia, al afectar a unas 700 hectáreas.

Este fuego que avanza por el Macizo Central de Ourense ha superado así las 578,7 hectáreas de otro incendio que se registró en la misma provincia, el de Vilardevós, que quedó extinguido este viernes, día en el que, precisamente, comenzó el de Chandrexa.

Por otro lado, en la provincia ourensana se ha estabilizado, a las 15:51 horas, el incendio que se decretó el viernes a las 22:03 horas en el ayuntamiento de Padrenda, parroquia homónima, que según las últimas estimaciones provisionales supera las 40 hectáreas. Horas antes, a las 12.45 h, se estabilizó el de Monteseiro, en A Fonsagrada (Lugo), que comenzó el martes por la tarde y lleva 120 hectáreas quemadas.

En A Coruña se ha extinguido este sábado, a las 18.15 horas, el incendio de Camariñas-Xaviña, que finalmente afectó a 51,98 hectáreas. La UME participó en las tareas de extinción de este fuego que obligó a decretar días atrás la situación 2 de emergencia. Además, siguen controlados los dos de Ponteceso: Corme Aldea (60 hectáreas) y Brantuas (200 hectáreas).

El incendio de Ávila sigue activo

El fuego del municipio abulense San Bartolomé de Pinares, declarado este viernes y que se extendió a las Navas del Marqués, ha provocado el desalojo de 1.500 vecinos, que desde este sábado por la noche han podido ya regresar a sus casas, aunque el incendio, que ha quemado entre 500 y 600 hectáreas, aún continúa activo.

Durante la jornada, los bomberos han conseguido mantener estable el perímetro, sin que el fuego se extienda, a pesar de las «muchas» y continuas reproducciones de pequeñas llamas y pese a que el humo acumulado no ha permitido trabajar a los medios aéreos hasta media mañana.

A lo largo de la noche, que se espera «tropical» y con condiciones «desfavorables», en palabras del técnico del Puesto de Mando Avanzado (PMA) Víctor Fernández, han seguido trabajando los medios desplegados durante este sábado.

Operan allí casi un centenar: 6 aéreos, 18 agentes medioambientales, 23 cuadrillas terrestres, 22 autobombas, 6 bulldozer, 6 cuadrillas helitransportadas (BRIF), 6 técnicos y otros medios, junto al despliegue realizado por la Unidad Militar de Emergencias (UME).

El humo ha hecho además que el Ayuntamiento de las Navas aconsejara el uso de mascarilla. El incendio también ha provocado cortes de tráfico, algunos ya restablecidos, y ha afectado al servicio ferroviario entre Madrid y Ávila, lo que ha obligado a Renfe a establecer desvíos y rutas alternativas en autobús para cientos de viajeros que se han visto perjudicados.

Este incendio se produce mientras continúa activo el que se declaró el pasado 28 de julio en el Barranco de las Cinco Villas y que, hasta su control, ha arrasado en torno a 2.200 hectáreas en esta zona del sur de la provincia de Ávila.

Cinco incendios activos en León

Además, la jornada ha sido complicada también en la provincia de León, donde permanecen activos cinco incendios forestales en nivel 1 de gravedad por las dificultades para su extinción. Se sitúan en las localidades de Yeres y Llamas de Cabrera, en la comarca de El Bierzo, y en Orallo, Fasgar y Fontoria, estos en el Valle de Laciana.

A las tareas de extinción en Orallo se ha sumado el Equipo de Reconocimiento y Primera Intervención del Quinto Batallón de la Unidad Militar de Emergencias (UME). No son estos los únicos incendios que sufre la provincia leonesa en estos momentos, ya que se encuentran activos otros dos en Cabañas de Dornilla y Anllares del Sil, y otro se ha dado ya por controlado dentro del término municipal de la capital leonesa.

El incendio de Aranjuez, estabilizado

Por otro lado, el incendio forestal declarado en la noche de este viernes en el municipio madrileño de Aranjuez se ha dado por estabilizado tras afectar a cerca de 300 hectáreas de vegetación, según ha informado Emergencias 112.

El fuego obligó a desalojar de manera preventiva en la noche del viernes a residentes en 30 viviendas de la zona de Valdecasas y otras 41 de la zona de Sotomayor, según han apuntado desde el Ayuntamiento de Aranjuez. Sin embargo, Emergencias ha dejado regresar a las personas desalojadas a sus casas en la noche este sábado.

El dispositivo de Emergencias ha tomado esta decisión «ante la ausencia de reactivaciones importantes» y «la favorable evolución de las labores de remate y aseguramiento del perímetro».