Durante la tercera jornada en Royal Portrush, Justin Rose protagonizó dos impactantes sockets, también conocidos como shanks en un breve tramo de cuatro hoyos, enviando la bola hacia el público presente en ambos casos. Lo hizo en los hoyos 8 y 11; encadenando bogeys inesperados tras haber empezado su recorrido de forma espectacular y verse cinco bajo par.

El primer shank en el hoyo 8 provocó un grito de “¡Oh my god!” al enviar la bola al público, seguido de un segundo en el 11 al enganchar la bola con el hosel (parte del palo donde el eje se conecta con la cabeza del palo). Pese a ello, Rose mantuvo la compostura, recuperó terreno y cerró una vuelta de 68 golpes; que incluyó ocho birdies, tres bogeys y un doblebogey, terminando la jornada a -5 y a nueve del líder Scottie Scheffler

Puede seguir a OpenGolf en Facebook; Twitter; LinkedIn y suscribiéndose a través de este enlace a nuestra Newsletter Semanal