Los dos incendios forestales de mayor gravedad que afectan este lunes a la provincia de Zamora, en Puercas y Molezuelas de la Carballeda, han obligado a evacuar cuatro localidades más por la amenaza directa de las llamas y el humo, mientras ambos fuegos se mantienen en el máximo nivel de emergencia, según han confirmado fuentes de la Subdelegación del Gobierno y de la Junta de Castilla y León.

En el caso del incendio declarado esta tarde en Puercas, en la comarca de Aliste, ha sido necesario desalojar tanto la localidad de origen del fuego como la vecina San Martín de Tábara. Además, se ha cortado la carretera ZA-P-2433, que conecta Puercas con Ferreruela de Tábara.

Por su parte, el incendio de Molezuelas de la Carballeda, que ya desde el domingo mantiene en vilo a varias zonas del norte zamorano, ha forzado la evacuación este lunes de Villageriz y Alcubilla de Nogales.

También sigue cortada la carretera ZA-P-2554 entre Congosta y Ayoó de Vidriales, aunque ya se ha reabierto el tramo entre Congosta y Cubo de Benavente.

Activado el nivel 2 de alerta en Tres Cantos por un incendio descontrolado cercano a viviendas

Este incendio ha sido especialmente agresivo: desde el domingo, ha obligado a desalojar a unas 850 personas, incluyendo vecinos y veraneantes de Molezuelas de la Carballeda, Congosta, Uña de Quintana y Cubo de Benavente.

Durante la tarde de este lunes, las autoridades han ordenado una nueva evacuación en Congosta y han confinado a los residentes de Ayoó de Vidriales y Carracedo.

El fuego, que todo apunta a que fue intencionado, ha calcinado ya unas 3.500 hectáreas y ha causado importantes daños materiales. En Cubo de Benavente, las llamas han destruido dos viviendas, un almacén de ferretería, casas abandonadas y naves ganaderas.

Los dispositivos de emergencia siguen trabajando en ambos frentes con medios aéreos y terrestres, mientras las autoridades alertan del alto riesgo debido a las condiciones meteorológicas y la posible reactivación de focos.

La Junta mantiene activo el protocolo de nivel 2, que implica riesgo directo para la población y exige medios extraordinarios de intervención.