Ha llegado la hora del adiós definitivo, ahora sí, del gran torero de Cáceres Emilio Rey. A sus 61 años, y después de casi tres décadas sin torear, volverá a vestirse de matador de toros para lidiar en un festival taurino que se celebrará el próximo 24 de agosto en la localidad de Zarza la Mayor. Hará el paseíllo acompañado de los rejoneadores Sebastián Fernández y Paco Velázquez y el novillero Toñín Bravo. El festejo comenzará a partir de las 19.00 horas y la entrada costará 20 euros.

Motivos

«Lo hago como agradecimiento a todo el mundo que me ha echado una mano: ganaderos, empresarios, banderilleros, amigos… Va a ser un día muy bonito», señala Rey, que incide en que también tiene que ver con su jubilación como torero: «Los requisitos que me piden son haber estado en 150 festejos, tener 55 años y tener, al menos, una actuación en el año de la despedida», sentencia el matador, que se pondrá en frente de un novillo de El Quintanar.

Emilio Rey.

Emilio Rey. / Carlos Gil

Preparación

El matador ya lleva varias semanas preparándose para su gran día, tanto con toreo de salón como físicamente y en tentaderos. «Me lo estoy tomando muy en serio. No voy a torear por el boletín, sino porque me gusta y quiero dar lo mejor de mí. Voy a hacer disfrutar a toda la gente que vendrá a verme. Muchos son amigos, toreros, antiguos alumnos míos de la Escuela Taurina…», subraya emocionado.

Con De Justo

Además, sus entrenamientos le están dejando estampas que recuerda con mucho cariño. «Fui uno de los maestros que dio clase a Emilio de Justo. Y el otro día, practicando con él, entré a matar y se reía. Me dijo que yo le había corregido muchas veces, pero que esta vez lo iba a hacer él», rememora entre risas.

Emilio Rey, en su restaurante.

Emilio Rey, en su restaurante. / Carlos Gil

«Estoy preparado»

«He pasado 27 años sin hacer prácticamente nada, solo dar clase y algún tentadero. Lo mínimo. Es que yo no tenía pretensiones de volver al ruedo. Pero todos me están diciendo que me ven bien, que estoy preparado», asegura.

Al 100%

«Quiero estar al 100%, darlo todo. No voy a dejar nada por decir. Si me tuvieran que dar los tres avisas por estar toreando, que lo hagan. Pero quiero disfrutar, quiero vivir cada instante y cada momento. Yo me encuentro fuerte, pero para matar un festival. Me llegaron a ofrecer una corrida de toros, pero no estoy para tanto. Y tampoco quiero quitarle la posibilidad a otro torero que sea modesto», remarca Rey, ansioso ya de hacer el paseíllo en Zarza la Mayor.

Toros en Zarza la Mayor.

Toros en Zarza la Mayor. / E. P.

Banderilleros

Le acompañarán como banderilleros Fernando Palacino y Alejandro Blanco. El primero le lleva acompañando a todos los tentaderos que ha realizado en los últimos meses y, además, le conoce desde que era un niño.

Zarza la Mayor

¿Y por qué en Zarza la Mayor? «Siempre he querido mucho a ese pueblo por don Heraquio Pombo, un ganadero importante de la región que era muy amigo de mi padre. Hay un sentimiento muy grande hacia ese municipio. Es el lugar ideal, el que primero me dio el ‘sí’», señala. «Eso sí, hubiera sido muy bonito que mi último festejo fuera en Cáceres, en la Era de los Mártires, pero es que aquí no se dan festivales. Yo sigo pensando en los demás, como siempre, y prefiero que, antes de que haya una corrida para mí, que haya una novillada para los jóvenes de aquí», explica.

Emilio Rey.

Emilio Rey. / Carlos Gil

Se cierra el círculo

Además, es el cierre de círculo perfecto. La primera vez que se puso delante de un astado fue en la ganadería de Nano Bravo, en una fiesta. En su retirada, Emilio Rey hará el paseíllo con Toñín Bravo, su sobrino. Es su despedida soñada. n

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