Especialistas analizaron la relación entre el consumo de papa y la aparición de diabetes de tipo 2 en casos de ingesta diaria de este alimento

11/08/2025 – 18:41hs

Alerta papa fritas: un estudio advierte el riesgo vinculado a una enfermedad particular

Las papas son uno de los alimentos más consumidos en el mundo y, en muchas culturas, representan un pilar fundamental de la dieta diaria. Sin embargo, un nuevo estudio de la Universidad de Harvard, citado por National Geographic, arrojó una advertencia importante: el modo en que se preparan puede tener un impacto significativo en la salud, especialmente en el riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2. La investigación analizó la relación entre la ingesta de este tubérculo en sus distintas formas y la aparición de esta enfermedad, con un resultado que pone en el foco a una de las preparaciones más populares a nivel global.

El estudio, publicado en la revista científica BMJ, analizó casi cuatro décadas de datos dietéticos de más de 205.000 profesionales de la salud. Los resultados fueron sorprendentes: mientras que el consumo de papas hervidas, al vapor o al horno mostró un riesgo de diabetes marginalmente bajo, la ingesta frecuente de papas fritas se asoció a un aumento considerable del riesgo. «La conclusión principal es que no todas las papas se crean de la misma manera», señaló Seyed Mohammad Mousavi, el investigador principal del estudio.

Por qué las papas fritas son la principal preocupación

Los científicos sospechan desde hace años que las papas blancas podrían aumentar el riesgo de diabetes de tipo 2. Esto se debe a que, cuando el cuerpo descompone el almidón de la papa, este se convierte rápidamente en glucosa, lo que provoca un pico de insulina en el torrente sanguíneo. Lo que destaca el nuevo estudio es que este efecto se ve amplificado exponencialmente cuando la papa se somete a procesos de fritura.

La investigación de Mousavi, que incluyó un metaanálisis de estudios similares a nivel mundial, permitió identificar que el mayor riesgo está directamente vinculado a las papas fritas. Pratik Pokharel, un especialista del Instituto Danés del Cáncer que no formó parte del estudio, avala esta conclusión: «Un mayor consumo de papas fritas se asoció con una menor tolerancia a la glucosa y una reducción de la sensibilidad a la insulina. Estos efectos, con el tiempo, podrían aumentar el riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2».

El estudio definió una porción de papas fritas como aproximadamente entre 110 y 170 gramos (el equivalente a unas papas medianas o grandes de una cadena de comida rápida). Se identificó que consumir tres porciones a la semana estaba ligado a un aumento del 20% en el riesgo de diabetes. La clave, según los especialistas, es que cuanto más se consuma, «más pronunciado se vuelve el riesgo».

¿Las papas fritas de batata son más saludables?

Si bien el estudio no se centró específicamente en las papas fritas de batata, las investigaciones existentes sugieren que podrían tener un índice glucémico más bajo. Esto significa que la glucosa de la batata ingresa al torrente sanguíneo de forma más gradual que la de la papa blanca. No obstante, al ser también un carbohidrato, el riesgo de diabetes podría aumentar si se consume en grandes cantidades, especialmente si la preparación incluye grandes cantidades de aceite, sal y grasa. Los expertos coinciden en que se necesita más investigación para sacar una conclusión definitiva.

Alternativas para reducir el riesgo sin renunciar a las papas

A pesar de los hallazgos, los investigadores son conscientes de la popularidad de la papa y buscan ofrecer alternativas más saludables. En este sentido, señalan que reemplazar las papas hervidas o al horno por cereales integrales, como el arroz integral o la avena, podría reducir el riesgo de diabetes en un 4%. Por otro lado, la sustitución de las papas fritas por granos integrales podría disminuir este riesgo hasta en un 19%.

Si la idea de renunciar por completo a las papas fritas es impensable, los especialistas sugieren centrarse en la forma de preparación para reducir los riesgos:

  • Cocción más sana: Optar por papas fritas caseras horneadas con una pequeña cantidad de aceite de oliva. Si bien no se comparó directamente la fritura tradicional con el uso de freidoras de aire, los expertos creen que estas últimas representan un riesgo mucho menor.
  • Moderar las porciones: Reducir el tamaño de las raciones es un paso sencillo pero efectivo.
  • Complementar la comida: En lugar de que las papas sean el plato principal, pueden acompañarse de ensaladas u otras opciones más saludables que equilibren la ingesta.

La principal conclusión del estudio es que las pequeñas decisiones que tomamos en nuestro día a día tienen un impacto acumulativo en nuestra salud. Elegir una preparación más saludable para las papas puede ser un cambio simple con grandes beneficios a largo plazo.