El cruce de El Berrón, en Siero, es una de las encrucijadas más conocidas de Asturias y es posible que sea el punto del Principado por el que más ciclistas pasan a diario. Así lo aseguran algunos vecinos y lo cierto es que si uno quiere pararse a observar y tomarse la molestia de contar los que aparecen en pocos minutos la cantidad de ellos que se ven es bastante importante.

Esperando un día de semana en el cruce, donde confluyen las avenidas de Santander y Langreo en El Berrón, se puede comprobar cómo al cabo de tan solo diez minutos han llegado a pasar por este punto hasta treinta ciclistas. Esto cuando el reloj apenas marca las diez de la mañana y aún queda mucha jornada por delante. «Por aquí pueden llegar a pasar tranquilamente 300 al día», explica uno de los empleados de BitBike Cycling, tienda especializada en bicicletas en la localidad sierense que abrió sus puertas hace tres años en la zona.

Los responsables de la tienda aseguran que «hemos llegado a oír que era el de más afluencia de España e, incluso, de Europa, aunque eso ya nos parece decir demasiado», señalan.

La razón de que pasen tantos por la zona es obvia, explican. «Todos los que vienen de Oviedo, Gijón y las Cuencas tienen que pasar por aquí obligatoriamente», destacan.

Y es que el cruce es «un punto estratégico de la ruta ciclista que va desde Gijón hasta Muncó», explica Francisco Fuentes, presidente de la Escuela de Ciclismo Viella.

El itinerario pasa por el Alto de la Madera, «un clásico para los ciclistas de Gijón y la Pola, sobre todo». Actualmente, después de la construcción de la autovía, es una carretera ideal con pocos coches, buen asfalto y unas espléndidas vistas.

La ruta cicloturista tiene una distancia de 53,36 kilómetros que pueden hacerse en alrededor de tres horas. Sus asiduos la califican como «fácil, bien señalizada y apta para los que se inician en este deporte».

Consta de un desnivel positivo y negativo de 636 y 634 metros, respectivamente, y una altitud máxima de 377 metros. Es un itinerario calificado como circular que pasa, además, por Pola de Siero y Muñó para regresar de nuevo a Gijón. «La gente que viene desde Gijón, no tiene otro sitio por el que regresar más que pasando por aquí», indican los trabajadores de BitBike Cycling.

Lo cierto, es que, tal y como señalan desde el establecimiento, «el ciclismo es un deporte que cada vez gana más adeptos y esta zona no es una excepción».

Por otra parte, Siero es el concejo con mayor ratio de kilómetros de carril bici por habitante y la movilidad ciclista es una de las apuestas del gobierno local.

De hecho, en el acceso a la Pola por la rotonda de Ullaga hay instalado un contador de ciclistas para determinar cuántos pasan a diario y cuántos se van acumulando a medida que transcurre el año.