El programa Copernicus, que opera los satélites Sentinel-1 y Sentinel-2, sitúa en 22.843 hectáreas la superficie estimada arrasada por el incendio de Molezuelas de la Carballeda, el mayor de la provincia. El segundo gran foco, en Puercas, alcanza las 1.637 hectáreas. Ambos fueron detectados el 12 de agosto y permanecen activos.

La Junta mantiene los dos incendios, el de Molezuelas, iniciado el domingo, y el de Puercas, que comenzó el lunes, en Índice de Gravedad Potencial 2, «activos y en situación complicada», según el último comunicado.

Además, la Delegación Territorial de la Junta en Zamora indica que las previsiones meteorológicas para la tarde apuntan a vientos y temperaturas que dificultarán las labores de extinción.

Fuentes del operativo explican que ambos fuegos presentan focos activos que, impulsados por el viento, se desplazan hacia el norte. El principal objetivo ahora es frenar la propagación y evitar reproducciones, protegiendo en todo momento la seguridad de la población y las localidades cercanas.

En Molezuelas, el fuego avanza sobre una combinación de matorral, terrenos agrícolas y masas forestales, con un perímetro que abarca amplias zonas de la Carballeda, según indican los informes de Copernicus. En Puercas, la mayor parte de la superficie afectada corresponde a matorral y áreas naturales, con un avance más contenido pero igualmente complejo de controlar.

Los mapas de peligro de incendio de Copernicus EFFIS ya indicaban un riesgo alto en estas áreas desde días antes de declararse los incendios, que ahora arden sin control. Desde el programa europeo indican que la conjunción de viento, temperaturas elevadas y baja humedad del combustible vegetal está detrás de la rápida expansión y de la dificultad para contener los frentes en las provincias de Zamora y León.