«Un papel decisivo». Así describen altos directivos del sector del golf el trabajo entre bambalinas que ha tenido Foment del Treball a la hora de atraer la Ryder Cup de 2031 a Girona. La gran patronal catalana ha sido la gran valedora para que la competición golfista regresara a España tras celebrar una primera edición en Valderrama (Cádiz), en 1997. No ha sido fácil, han intervenido muchos actores. Uno de ellos, quizá de los más decisivos, ha sido Foment.

Imagen del trofeo de la Ryder Cup con Tossa de Mar (Girona) de fondo

Lo detallan estos ejecutivos en conversación con este medio, precisando que el ente que preside Josep Sánchez Llibre «se volcó» para que la Ryder superara todas las dificultades y confiara en Cataluña. Y eso que hubo «elegancia» por parte de otras comunidades autónomas.

«Pero si no se la quedaba Cataluña, otras autonomías la perseguían. Euskadi estaba muy interesada. Madrid y la Comunidad Valenciana, también. Todo el mundo tenía claro que o se celebraba en Girona, o sería en otro lugar de España», han apostillado.

Un ‘loco del golf’

Estas voces recuerdan que el proyecto de devolver la Ryder a España se gestó en 2015, cuando el empresario irlandés Denis O’Brien, multimillonario, compró una mayoría de acciones del PGA Catalunya Resort, hasta entonces controlado por Vichy Catalan. Ya estaba presente desde 2008, pero alcanzó una posición accionarial decisiva. 

Lo reformó y reposicionó, rebautizándolo como Hotel Camiral. Reabrió en 2016 con la vitola de ser de los mejores resorts de golf de España. Pero le faltaba su bautismo de juego, la Ryder Cup. «Era su sueño», explican los mismos interlocutores.

Hotel Camiral y su campo de golf

Hotel Camiral y su campo de golf

FOMENT

Un primer intento en 2015 para acoger la Ryder en 2022 fracasó: se la llevó Italia. 

Dificultades con Aragonès

Hubo un interín, pero las gestiones para postularse de nuevo recomenzaron. «Discretamente», insisten los directivos consultados, puesto que de lo contrario el torneo bienal se podría volver a escapar.

Eso sí, llegó la pandemia del coronavirus, que obligó a cancelar la edición de 2020 y retrasó los planes de Cataluña. En 2022, un año antes de que la liza transoceánica aterrizara en el Marco Simone Golf and Country Club transalpino, la candidatura catalana cogió velocidad.

Pero hubo un problema, y es que el Govern de Pere Aragonès (ERC) puso peros.

‘No’ al tercer campo

En 2023, por ejemplo, el Ejecutivo de los independentistas vetó la construcción del tercer campo en el Camiral, algo altamente recomendable para acoger la Ryder. Finalmente, de hecho, el cara a cara en el green de 2031 se disputará en dos campos: el Stadium Course y el Tour Course, siendo el primero el oficial.

Trofe de Ryder Cup

Hubo más. «El Govern de Aragonès se negó a provisionar los 30 millones necesarios –se pagarán con los ingresos de la tasa turística– para consignar si el Gobierno no depositaba su parte», alertan estas voces.

Fue aquí, por ejemplo, cuando intervino Foment, que consiguió por la vía de una enmienda presentada por el PDECat en el Congreso que el Gobierno consignara 1,5 millones para impulsar la candidatura. La propuesta se aceptó, y terminó incluida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023. «El dinero está», explican fuentes cercanas a la Ryder.

El autoboicot de ERC

Hubo una tercera línea de oposición, más sibilina, y que algunos atribuyen al sector cainita de ERC. Se filtró a los medios la petición de ampliación del Camiral para preparar el relato para el no del Govern de Aragonès, y ese leak se atribuyó a los irredentos republicanos.

Se buscaba torpedear la candidatura para, en teoría, contentar a las bases ecologistas de Esquerra. La excusa fue la sequía, y hubo medios que participaron de la campaña contraria.

Pero otro sector emergió, el de los alcaldes republicanos en Girona, que son muy favorables a la competición y, también, muy influyentes. Se ha terminado imponiendo su criterio.

Pau Gasol, presentando la Ryder Cup en Camiral ayer

Pau Gasol, presentando la Ryder Cup en Camiral ayer

Luis Miguel Añón

Dinero y unión

En este clima enrarecido, algunos actores, como Foment, maniobraron con su habitual discreción y guante de seda para «conseguir los fondos necesarios y el consenso entre Administraciones«. Además de la enmienda a los PGE, se entiende que Foment peleó en Madrid y Barcelona para mover voluntades.

La candidatura catalana dio un vuelco en 2024, cuando Salvador Illa ganó las elecciones autonómicas, venciendo a Pere Aragonès.

Entre otros muchos compromisos, el president socialista ha fijado dos carteras clave: retomar la ampliación del Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat y captar la Ryder Cup de 2031. Por el momento, parece haber cumplido ambas. También desde el perímetro de las negociaciones se destaca el papel del Consejo Superior de Deportes (CSD), muy volcado en que el segundo intento catalán viera la luz.

Lealtad y el ‘conseller’ Dalmau

En efecto, directivos implicados en las conversaciones destacan la «lealtad» de los participantes entre sí. La Federación Española de Golf respetó la propuesta catalana, aunque se guardó el as en la manga de Madrid por si la oposición política cainita arruinaba el esfuerzo de Camiral.

Hotel Camiral y su campo de golf

En el difícil juego de espejos que son los contactos al más alto nivel, destacó el papel del conseller de Presidencia, Albert Dalmau, que ejecutó con decisión la voluntad del president Illa de ganar la liza.

Ha ocurrido, y ayer se presentó el éxito en sociedad. La gran patronal catalana emitió una comedida nota de felicitación que «no refleja el esfuerzo realizado entre bambalinas». Preguntada por su labor, el ente ha preferido remitirse al comunicado.

Obras

Fuentes cercanas a los contactos insisten en que aunque algunos medios han citado al abogado Emilio Cuatrecasas —que tiene intereses empresariales en la provincia— y a Barcelona Global como facilitadores del éxito, el papel de Foment ha sido más preponderante. 

En cualquier caso, ejecutivos del sector recuerdan que «se pone el cronómetro en marcha para comenzar a trabajar de cara a 2031». Se impone preparar el resort-sede «y el resto de Cataluña, pues se prevén actos en las cuatro provincias» para acoger el duelo en el verde en seis años.

«¿Elitista? En Cataluña hay 30.000 personas federadas que practican golf. Es un regalo para ellas, pero sobre todo para todo el territorio: Santiago Apóstol ha ayudado a Cataluña», apostillan las mismas voces.