La provincia de Ourense ha pasado otra noche pendiente del fuego, que arrasa ya 23.700 hectáreas en los incendios que siguen sin control. La cercanía de las llamas a las casas ha obligado a ordenar nuevos confinamientos en la provincia de Ourense durante la mañana de este jueves. Permanecen confinados cientos de vecinos vecinos de Casas dos Montes, en el municipio de Oímbra, y Madanela, en Monterrei. También fueron han sido desalojados 40 vecinos de Bouza, en el municipio de Viana do Bolo, que posteriormente han podido regresar a sus casas.
Uno de los brigadistas heridos en el incendio del municipio ourensano de Oímbra tiene quemaduras en el 60% del cuerpo
Según Medio Rural permanecen activos seis incendios, todos en la provincia de Ourense, después de que varios de los focos se hayan unificado. Es el caso de Chandrexa de Queixa, donde los focos originados en las parroquias de Requeixo y Parafita se han unido en un solo incendio, que ha arrasado en conjunto más de 10.500 hectáreas, convirtiéndose en el segundo mayor fuego de la historia en Galicia, según informa La Voz de Galicia.
También se han unificado los fuegos de Castro de Escuadro y Santiso, en el municipio de Maceda, que afectan en conjunto a una superficie de alrededor de 2.200 hectáreas.
Continúan activos además los incendios de Oímbra-A Granxa, A Mezquita-A Esculqueira, Vilardevós-Vilar de Cervos y Larouco-Seadur.
En la misma provincia, están estabilizados, según la Xunta, los fuegos de Ourense-Seixalbo, Vilariño de Conso-Mormentelos, Montederramo-Paredes y Vilardevós-Moialde, al igual que el de Dozón-O Castro, en Pontevedra.
Además, las autoridades dan por controlados los incendios de A Estrada-Souto, en Pontevedra; los de Samos-Santalla (200 ha) y A Fonsagrada-Monteseiro, en Lugo, y el de Verín-Mourazos, en Ourense.
La situación 2 de emergencia permanece activa en toda la provincia de Ourense, lo que implica una mayor agilidad de medios y recursos, una ampliación del horario laboral del personal y se agilizan los trámites con las diferentes administraciones, especialmente la Unidad Militar de Emergencias (UME), tal y como explica Medio Rural.
A esta cifra se suman unas 3.000 hectáreas calcinadas previamente en el verano en Galicia -con base en datos de los fuegos comunicados por Medio Rural, que solo informa de los que superan las 20 hectáreas-, lo que eleva por encima de las 25.000 hectáreas la superficie arrasada en toda la campaña de alto riesgo en la comunidad.
En cuanto a las carreteras, la A52 ha sido reabierta después de estar cortada a lo largo de la taarde desde Xinzo a Benavente. Sin embargo, la N525 permanece cerrada a la altura del punto kilométrico 86, carretera que se encuentra en nivel negro, según la Subdelegación del Gobierno, por el incendio forestal que ha pasado este jueves de Galicia a la localidad zamorana de Castromil.
Por saturación del área de estacionamiento se ha procedido al embolsamiento de los vehículos que circulaban por la calzada del sentido creciente de la A52, en el área de servicio del punto kilométrico 15, Quiruela de Vidriales, en Zamora.
Permanecen evacuadas las localidades de Castromil y se ha procedido a la evacuación de Pías, Barjacoba, Villanueva de la Sierra y Porto.
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También el fuego ha afectado a la circulación de trenes, que entre Galicia y Madrid está cancelada para el resto del día.