Kate Middleton ya no es el miembro más popular de la familia real británica. Ahora, la opinión pública se ha decantado a favor de otra representante de la Corona, según las cifras del último sondeo de YouGov, publicado el 8 de agosto. El índice de popularidad de la Princesa de Gales, figura influyente y admirada al otro lado del Canal de la Mancha, cayó un punto en primavera. Una caída pequeña, pero suficiente para beneficiar nada menos que a su marido, el Príncipe Guillermo.

El Príncipe de Gales está en racha ya que, como recoge el sondeo, el 74% de los británicos dicen estar satisfechos con su futuro rey. Su esposa, la Princesa de Gales, le sigue de cerca con un 71% de opiniones positivas, seguida por la Princesa Ana, la indispensable e incansable representante de la realeza. El rey Carlos, mucho menos popular que su hermana, divide más las opiniones ya que algo más de la mitad de sus súbditos le aprueban (59%), mientras que el 31% le rechazan. Su esposa, la Reina Camilla, sigue dejando escépticos a los británicos, cosechando un punto más de opiniones negativas (44%) que positivas (43%). Siguiendo con los miembros activos de la familia real, el Príncipe Eduardo y su esposa Sofía satisfacen a la mitad de la población y obtienen pocas opiniones negativas.

Los británicos están más de acuerdo sobre su percepción con el Príncipe Andrés y es poco probable que las últimas revelaciones sobre él mejoren la opinión de la ciudadanía encuestada: el 87% de la población tiene una opinión negativa sobre él. Su pasado, su mal carácter, sus enfrentamientos con su familia y su estrecha amistad con el delincuente sexual Jeffrey Epstein han salido a la luz titulado El ascenso y la caída de la Casa de York , una investigación del biógrafo real Andrew Lownie que está causando gran revuelo en el Reino Unido. Está por ver si hará cambiar de opinión al 5% que aún tiene una opinión positiva sobre él.

La curva de popularidad de los Sussex no ha dejado de caer desde 2020, cuando hicieron las maletas rumbo a Estados Unidos. Hoy, el 62% de los británicos ha dado la espalda al príncipe Harry y el 67% a Meghan Markle, la cifra más baja que ha obtenido nunca. Poco más de uno de cada cuatro (28%) mantiene una actitud positiva hacia el duque de Sussex, mientras que el 20% sigue confiando en Meghan.

En general, la popularidad de la Familia Real está creciendo. Seis de cada diez británicos aprecian a la Familia Real (62%) y a la institución de la monarquía en su conjunto (58%). Por el contrario, un tercio aprecia poco a la Familia Real (30%) o a la institución (32%). La opinión general es positiva sobre el futuro de la Corona. Al 65% de los británicos les gustaría mantener a un soberano al frente del país, mientras que a una cuarta parte (23%) le gustaría poder elegir a un representante.

La edad de los encuestados revela también importantes tendencias generacionales. El 81% de la franja de población de más edad desearía la continuidad de la monarquía, mientras que el 41% de los jóvenes de 18 a 24 años se muestra a favor. Algo más de una cuarta parte la considera incluso «vergonzosa». Una población que también se muestra menos dura con el príncipe Harry y Meghan Markle.