Continuando con la serie estival sobre las primeras obras conocidas de los maestros de la pintura y la escultura, esta semana nos vamos a fijar en un bodegón ejecutado por Diego Velázquez hacia 1616, cuando apenas contaba con 17 años. Los tres músicos es una pintura realizada en el taller de Francisco Pacheco, maestro del pintor sevillano, quien también sería su suegro.  

Lejos quedaba todavía la época de gloria en la corte de Felipe IV como el sublime retratista de la familia del rey. Durante esa época se dedicó al aprendizaje del oficio a base de representar bodegones. A pesar de ser considerado un género supuestamente inferior, sus escenas costumbristas de la cosmopolita ciudad hispalense del siglo XVII ya abordan la cotidianidad que conservó en obras tan destacadas como Las meninas o Las hilanderas.