El paseíllo de una novillada sin picadores es el desfile de varios soñadores vestidos de luces que sueñan con la gloria de ser algún día figuras del toreo. Los actuantes son jóvenes, imberbes y alguno ha cruzado un océano persiguiendo la aspiración de verse frente a un toro en el centro del ruedo.
Alejandro Chavarri, limeño, jugador de golf, surfero e hincha de la “U” cruzó el charco para inscribirse en la escuela de Tauromaquia de Palencia y quién sabe, seguir los pasos de Roca Rey. Este lunes, en su segundo compromiso en España vestido de luces, recibió a su eral de Hermanas Azcona de rodillas dándole un farol con el capote. No llegó a darle el segundo pues el novillo lo desplazó violentamente contras las tabla y le hizo golpearse contra el estribo. El violento sonido se escuchó en toda la plaza. Perdió durante unos segundos el conocimiento y en una escena estremecedora para todos los presentes fue conducido conmocionado en brazos de sus compañeros a la enfermería.
El riesgo que siempre está presente en una plaza de toros , se había hecho presente de la forma más abrupta y los temores de los espectadores fueron mitigándose al conocer minutos después que había recuperado la conciencia y la movilidad en la enfermería.
Pero si en algún espectáculo se tiene interiorizado que el show debe continuar, es en los toros. Hugo Casado, novillero barcelonés, se hizo cargo del eral y pudo disfrutar a placer de Artesano, novillo de buena reata de Hermanas Azcona al que cortaría la oreja que no había podido cortar en el de su turno.
El novillero que primero socorrió a Chavarri fue Jesús Mariano Herrera. También de Lima, cerró la tarde cuando su paisano iba en ambulancia camino del hospital . Se entendió muy rápido con el novillo más fuerte de la tarde, un nigeriano de procedencia Daniel Ruiz.
Placeado ya en tierras andinas, Herrera le supo dar fiesta y construyó pronto una faena de la que tomó nota rápidamente la mocina del Tendido de Sol, que este lunes fue el público más fiel. Los pases cambiados y los circulares al novillo de más transmisión de la tarde encantaron a la chavalería que lo hubiese pedido todo para el peruano de no haberse cruzado con los aceros.
De más cerca, pero también lejos llegó Daniel Fernández. El sevillano, de buen corte, no perdonó un quite y toreó también al viento. Perdió todo con los aceros en una tarde donde los sueños se transformaron en triunfo fue para unos y en golpe para otros.
GANADO
4 erales de la ganadería de Hermanas Azcona. Con presentación adecuada para el tipo de festejo, fueron nobles y colaboradores, Ovacionados al arrastre 2º, 3º y 4º.
TOREROS
Hugo Casado, ovación con saludos tras dos avisos y oreja en el que mató por Alejandro Chavarri.
Daniel Fernández, ovación con saludos.
Alejandro Chavarri, pasó a la enfermería en el recibo de su novillo.
Jesús Mariano Herrera, vuelta a ruedo tras aviso.
INCIDENCIAS
Plaza de Toros de Tafalla. Un tercio de asistencia sobre el aforo legal en tarde ventosa. El novillero Alejandro Chavarri fue golpeado contra el estribo al recibir de capa a su novillo. Pasó a la enfermería para ser enviado posteriormente al HUN para estudio radiológico y permanecer en observación.