Jaime Fernández asume un nuevo reto en su carrera deportiva: consolidarse definitivamente en la Liga Endesa, en las filas del Casademont Zaragoza, después de haber rendido el pasado curso muy por encima de las expectativas generadas. Más constante y esforzado, más maduro, más intenso en sus intervenciones, más seguro de sus fuerzas, el ala-pívot se ganó a pulso una renovación que contempla tres años más de contrato, hasta junio de 2028, y que supone «un premio» y «una muestra de confianza» para un jugador que ha sabido sortear a tiempo importantes obstáculos.
De hecho, el zaragozano tuvo que descender de categoría –tres temporadas en Primera FEB– para volver a creer en sus propias posibilidades y tomar nuevamente impulso hacia la élite. Ahora sigue por méritos propios en la primera plantilla zaragozana.
«El pasado año conseguí hacerme un sitio en el equipo, que era mi objetivo personal, y estoy muy contento por ello. Quiero seguir aprovechando las oportunidades», explicó el jugador aragonés, quien aboga por trabajar «día a día» en los entrenamiento, sin fijarse «metas a largo plazo».
De momento, el ala-pívot sí confesó sentirse «ilusionado» ante el nuevo curso, donde tiene previsto continuar creciendo para adquirir un mayor protagonismo en la pista. «Tenía muchas ganas de empezar, y además tengo la suerte de poder hacerlo desde el día uno», explicó Jaime sobre el inicio de la pretemporada. «Es un periodo para adaptarnos, para conocer a los nuevos jugadores y para ir plasmando las ideas del nuevo entrenador», recordó el canterano.
El ala-pívot, de 25 años de edad y 2,06 metros de estatura, regresó la pasada temporada al club aragonés, donde se había formado desde infantiles junto a otros ilustres canteranos como Carlos Alocén, Raúl Lobaco, Jaime Pradilla y Vit Krejci. Cuando volvió al Casademont Zaragoza, Jaime venía de compertir los tres últimos años en la Primera FEB: jugó en el Peñas Huesca, en el curso 2021-22, en calidad de cedido por el Casademont; se incorporó al Almansa la siguiente campaña, una vez finalizada su relación contractual con los zaragozanos; y se enroló en las filas del Valladolid en el ejercicio 2023-24.
En el último curso, de nuevo en la primera plantilla del Casademont, el ala-pívot participó en 22 encuentros de la Liga Endesa –estuvo lesionado en el tramo final de la temporada–, e intervino también en 9 choques de la FIBAEurope Cup. En el torneo doméstico, su mejor actuación se produjo ante el Río Breogán, en la sexta jornada (111-53), cuando alcanzó los 18 créditos de valoración global con 14 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias en apenas 19 minutos de juego. Y fue determinante en el triunfo contra el Barcelona (108-95), en el undécimo partido del campeonato, con 8 tantos y 10 capturas.
Mientras, en la competición continental brilló especialmente ante el Tofas Bursa, en la última jornada de la fase de grupos, que finalizó con una derrota por la mínima de los zaragozanos (79-80). Entonces, Jaime facturó 10 puntos, 7 rebotes y 16 unidades de nota general en los 23 minutos que permaneció sobre la pista.
¿Qué espera Jaime de la nueva temporada? «Ahora acabamos de comenzar el periodo de preparación. Sin embargo, sí puedo decir que tenemos un buen grupo, compuesto en su gran mayoría por jugadores jóvenes y apuntalado también con veteranos que son piezas claves en el vestuario. Podemos hacer un buen núcleo y conformar así un equipo competitivo», anunció el canterano, que también se refirió a Jesús Ramírez, el nuevo entrenador: «Nos ha explicado lo que pretende de cada uno de nosotros. La idea es crear una identidad como equipo, una identidad como club. Ahora se trata de sentar las bases para ello», insitió Jaime, ya recuperado totalmente de la lesión en el pie que le apartó del equipo en la recta final de la anterior temporada.
Exigente inicio de temporada
Al Casademont, sin embargo, le aguarda un exigente tramo en el inicio de la competición oficial: se estrenará contra el Baskonia, un equipo de Euroliga, en una primera jornada que se disputará el primer fin de semana de octubre en el pabellón Príncipe Felipe. «El comienzo es duro, pero tendrá lugar en nuestra pista y, además, nos enfrentaremos con un rival con el que nos suele gustar jugar. El Baskonia medirá nuestro verdadero potencial y nos indicará el nivel que tenemos que conseguir para sumar victorias», advirtió el ala-pívot del conjunto zaragozano.