Guillermo Ortega

Granada se estaba librando este verano de los incendios forestales, pero por desgracia hay que hablar en pasado porque este miércoles 20 de agosto se ha declarado uno en la comarca de Baza, al norte de la provincia, y pese a que se está combatiendo con medios terrestres y aéreos, desde el Infoca consideran «muy difícil» que pueda estabilizarse en lo que queda de día.

El fuego se ha declarado en torno a la una y media de la tarde en un paraje conocido como Las Asperillas, en el término municipal de Benamaurel, lejos de núcleos habitados. Allí se han desplazado los efectivos del Plan Infoca. A las tres de la tarde ya había en la zona siete grupos técnicos de operaciones, así como un agente medioambiental y una autobomba.

Eso, por tierra, en un dispositivo al que pronto se han sumado también efectivos del Consorcio de Bomberos de la Diputación Provincial de Granada. Por aire, inicialmente, han funcionado tres helicópteros: uno pesado, otro semipesado y un tercero de carga en tierra.

Aunque las previsiones iniciales eran razonablemente optimistas, pasadas las cinco y media de la tarde han empezado a soplar un viento molesto de poniente que ha avivado las llamas. En consecuencia, se han incrementado los medios para luchar contra las llamas. A las seis de la tarde, el Infoca ha informado a través de sus redes sociales de que ya había trabajando en la zona un total de nueve medios aéreos, entre ellos un avión de coordinación.

Un portavoz de prensa del Plan Infoca ha reconocido que la situación se ha puesto cada vez más difícil conforme la jornada ha ido avanzando y ha añadido que, por culpa del viento, es bastante improbable que el fuego quede estabilizado «al menos en las próximas horas», lo que va a obligar a los bomberos a continuar su trabajo por la noche.

Reportar un error