‘Viñetarama’ es una newsletter cultural, y gutural, con el cómic como columna vertebral que está escrita por el historietista y periodista Borja Crespo. Llega … cada tercer miércoles del mes a tu buzón y, si te gusta, puedes compartirla. ¡Gracias por leer!
Todavía queda verano, afortunadamente, y vida, mucha vida… La época estival resulta ideal para recuperar lectura acumulada, para aliviar los montones de papel, con grapa o lomo, que se acumulan en el escritorio, sobre la mesa de trabajo o en el mismo suelo del dormitorio. Por aquí hay que sortear pilas de libros y tebeos por todas las habitaciones de la casa. Es lo que hay. Hay vicios y vicios, y luego están los cómics. Quizás tenemos algo romantizado el acto de leer bajo el sol, en la playa o en algún escenario idílico, huyendo del calor, pero para eso se inventaron, entre otras cosas, las gafas oscuras, los sombreros, las gorras… y los árboles. No hay un placer mayor, acuciado con la edad. Pasar las páginas y olvidarte del tiempo, cobijado bajo la sombra de la cultura (¡toma horterada!).
Leyendo, sea un libro, un cómic o un maravilloso fanzine, te olvidas de muchas cosas. De la muerte. De los problemas. Te evades. Así es y así seguiré siendo, en analógico o digital. Con la canícula, la necesidad de desconectar, de descansar y visitar otros mundos, se intensifica, pero este verano de mar y montaña ha sido imposible olvidar todo lo que pasa a nuestro alrededor. Mientras escribo estas líneas, mueren bosques. El fuego destructor arrasa los campos, embravecido, y el ser humano recuerda que es una hormiga en una tierra gigante que no cuidamos lo suficiente y no merece nuestro desprecio. No nos aplicamos el cuento cada vez que una catástrofe nos atraviesa. No del todo, aunque siempre hay excepciones. Incendios hay, de muchos tipos, todos los días, y algunos son, aparentemente, muy difíciles de apagar. Es evidente por dónde va este pensamiento y me lleva directo a la primera recomendación de este boletín: ‘La guerra de Gaza’, de Joe Sacco, con edición de Reservoir Books. ¿Qué decir de este autor comprometido? Popular por su hábil fusión entre viñetas y periodismo en obras como ‘Gorazde: Zona protegida’ o ‘Notas al pie de Gaza’, su trabajo resulta de obligada lectura para situarnos en el mapa y entender lo inentendible.
Cualquier persona concienciada no puede mirar a otro lado cuando se pisotean los derechos humanos. Quien diga lo contrario, miente o es un psicópata. La falta de empatía pretende ser un signo de identidad de los tiempos que corren, ahogar la colectividad frente a un sistema que se basa en el hiperconsumismo, pero tontos no somos. Quieren que lo seamos, pero no lo somos. Cotejar la información, cuestionar relatos, confrontar y debatir es lo que toca. Leer, con conciencia y pensamiento crítico, es lo que tenemos. Recupero aquí ‘A quién benefician las migraciones’, un análisis profundo, sin escatimar en cifras, que señala sin contemplaciones cómo funcionan el control de las fronteras y cómo afecta a la economía el flujo de emigrantes, con varios grandes negocios, terribles y desalmados, organizados alrededor de uno de los grandes problemas del momento -no, no son las ONGs-. La lectura resulta escalofriante en algunos pasajes. Se te cae la venda de los ojos. Jeff Pourquié y Taina Tervonen firman al alimón esta recomendable novela gráfica que ofrece Garbuix Books en su interesante catálogo -que cuenta con varios ensayos en viñetas-.
‘La guerra de Gaza’ de Sacco se llevó un Premio Eisner hace unas semanas. También Javier Rodríguez, cuya enorme trayectoria está cosechando, por fin, sus frutos. . Sobre los Eisner, publicamos este tema en la previa de la entrega de los galardones. Y nos atrevemos a apostar que, tras el bombazo de ‘Zatanna’, el año que viene también se llevará el preciado trofeo por su inconmensurable trabajo gráfico en ‘Detective Marciano’, de venta en nuestro mercado después del verano con el sello de Panini. El autor asturiano estará presente, junto al reputado guionista Deniz Camp, en las Jornadas de Cómic de Avilés, que tendrán lugar del 9 al 13 de septiembre. Una cita ineludible -¡estará Garth Ennis!-, al igual que -toca hacer un poco de autopromoción- el Salón del Cómic de Getxo, que abrirá sus puertas del 3 al 5 de octubre con más ganas que nunca. Antes se celebrará la Comic-Con de Málaga, que, de momento, a un mes de sus fechas, del 25 al 28 de septiembre, ha anunciado más bien poco. Estarán Jim Lee y una cosplayer ultrafamosa. Se escucha el sonido de la chequera para solucionar la papeleta. Lo lógico es que la avalancha de confirmaciones llegue en nada, ¡las vacaciones se acaban! Los rumores no están sentando bien a un evento que no lo tiene fácil para satisfacer las necesidades de un sector incomprendido. Crucemos los dedos.
Cine de verano
Toca dar un volantazo, antes del rosario de recomendaciones, para hablar de cine, porque estos días hay varias adaptaciones de cómics en la cartelera, empezando por la más modesta: ‘Los Muértimer’. Los tebeos de Léa Mazé, multipremiados, son una delicia. Están disponibles en las librerías tres volúmenes editados por Astiberri, en su cuidada línea infantil y juvenil. El relato cambia significativamente en algunos aspectos en su traslación a imagen real, dando lugar, inevitablemente, a las comparaciones, pero la película, con producción nacional con el apadrinamiento de Álex de la Iglesia, se defiende bien como divertimento para todos los públicos. Es un título a tener en cuenta este verano, a la espera del próximo estreno de un proyecto que me atrae sobremanera, ‘Decorado’, la nueva propuesta animada de Alberto Vázquez, basada en el cortometraje homónimo, un prodigio visual con un montón de galardones especializados a sus espaldas. El filme se presentará en Sitges, el hábitat perfecto para iniciar su andadura tras el impacto de ‘Unicorn Wars’, el anterior trabajo del inquieto artista gallego, disponible en Filmin.
Este verano iba a ser la esperanzadora vuelta del género de superhéroes por todo lo alto, pero se ha llevado el gato al agua, léase las cifras de taquilla, ‘Jurassic World: El renacer’, por no hablar de la excelente salud creativa del cine de terror, con ‘Weapons’ a la cabeza, metiendo el dedo en la llaga de la rentabilidad. Estos días está siendo algo triste comprobar cómo tiran balones fuera algunos fans acérrimos de Marvel para no aceptar la realidad. «¡Qué mala es la peli de los dinosaurios!», repiten en sus perfiles sociales. Me la vi en Barcelona, en 4DX -moviéndose la butaca, con viento, agua y luces, cual barraca de feria-, y la audiencia, a rebosar, aplaudió al final de la sesión con Scarlett Johanson y el T-Rex mutante. Una semana más tarde pretendí revivir la experiencia sensorial, en la misma sala equipada, con ‘Los Cuatro Fantásticos’. Nada que ver. Soberano aburrimiento. Vaya guion, vaya decisiones arbitrarias, vaya motivaciones, vaya machetazos a las subtramas… Les da vergüenza que se vea a Mr. Fantástico estirándose, como Batman con el traje enmascarado en las pelis de Nolan… No sigo con el escarnio, pero intentar cazar al inmenso Galactus con una trampa para conejos es, sencillamente, bochornoso.
‘Jurassic World: El renacer’ es floja, sí, pero ‘Los Cuatro Fantásticos’ también. Por fortuna, como ocurre con ‘Star Wars’, ha venido de nuevo la animación para salvar la papeleta a Disney y Marvel. La serie de capítulos autoconclusivos ‘Los ojos de Wakanda’ está muy bien. Altamente recomendable. Y al que esto escribe le gustó, perdonen la aparente insolencia, el ‘Superman’ de James Gunn. Camp, desvergonzado, humano, entretenido… pura cultura pop, como los tebeos. Tiene sus grietas, por supuesto, no es perfecta, para nada, acusa serios problemas de ritmo, pero se agradece el tono, un claro regreso, actualizado, a los orígenes reales del personaje. El hombre de acero mesiánico de Zack Snyder no era el camino, alejado de las viñetas originales. Las comparaciones y elucubraciones sobre los ingresos en taquilla que han hecho ambas propuestas, una discusión tan aireada como estéril en la red, sobran… El estado actual del circuito de exhibición tradicional y el género de superhéroes no es el mismo, por desgracia. Pongo la mano en el fuego a que un proyecto como ‘Man of Steel’, estrenado hoy, se iba a comer un colín. Una polémica baldía, innecesaria y errática. En nada se estrena la segunda temporada de ‘Peacemaker’ para aliviar conciencias –me encantó la primera sesión-. Quien quiera un baño de realidad sobre el estado de las cosas en el ámbito del cine comercial de aventuras y más allá, que se vea ‘Rebel Moon’ en bucle en el sofá de su casa, emulando la famosa escena de ‘La naranja mecánica’, con los ojos vidriosos ante el perturbador espectáculo. Gracias, Gunn, por existir. Uno de los nuestros. Imperfecto, pero divertido. A estas alturas no le pido más a un género que no vive su mejor momento. Para reflotarlo, siento insistir, hay que aceptar la realidad. Bienvenidas sean las nuevas ideas y el desparpajo en pos de la función.
Lecturas de verano
¿Qué leer estos días teniendo tiempo y algo de vil metal que poder gastar? Enlazando las diatribas sobre Superman, es un buen momento para recuperar, en una edición asequible, ‘All Star Superman’, la obra magna de Grant Morrison y Frank Quitely. Un goce mayúsculo para los sentidos, al alcance de la mano, con la etiqueta Must-Have de Panini. ¡Qué viñetas, por Krypton! La misma casa ha lanzado el tomo recopilatorio ‘Alien: Blanco, negro y sangre’, a buen tamaño. Una referencia que viene que ni pintada con el estreno en paralelo de la serie ‘Alien Earth’ en Disney + (por ahora, va bien). Los amantes de la criatura diseñada por Giger con afán completista no pueden dejar pasar este compendio de viñetas salpicadas con abundante hemoglobina. Viene bien apuntar también en la bolsa de la compra ‘La mano y los seis dedos’, un potente thriller que transcurre en un marco futurista que ya está en las estanterías de venta al público gracias a Norma Editorial.
Me ha gustado la tercera entrega de la recopilación de historietas bajo el nombre de ‘Creepshow’, el clasicazo de Romero y King. Publica Moztros por estos pagos y -ojo- incluye una historieta siniestra y vampírica con guion del cineasta Eugenio Mira (‘The Birthday’) y dibujos de Jorge Fornés. Un dueto formidable. ¡Ambrosía!
Por cierto, Astiberri editará a principios de septiembre el art book de la película ‘Decorado’, con una pintaza extrema, y apuesta por el cómic ’20th Century Men’, del cual he podido ver un increíble adelanto. Ya en el mercado americano, es una serie brutal, cuya lectura viene muy bien en estos tiempos convulsos. Deniz Camp -ya ha salido dos veces en estas líneas- y Stipan Morian firman una mirada fantástica a una posible Tercera Guerra Mundial. Hasta ahí puedo leer. Entre las variadas lecturas que he rescatado estos días bajo el sol, me he desternillado con ‘Todos los superhéroes que existen’, del inefable Rubén Fdz, un tebeillo jacarandoso disponible vía Fandogamia y en tiendas especializadas por solo 4 euros de nada. El retrato ácido que realiza el autor, con su peculiar sentido del humor, sobre el mundillo de los superhéroes, muy necesitado de autocrítica, es sublime… Aprovecho para destacar el excelente trabajo que están haciendo muchos artistas en las páginas de los números mensuales de ‘El Jueves’. La revista sigue aguantando el tipo con un nivel autoral digno de aplauso.
Dolmen continúa editando las tribulaciones del Juez Dredd a todo trapo. ‘El día del juicio’ cuenta con Garth Ennis y Carlos Ezquerra en los créditos, ahí es nada. Esta historia clásica publicada por la revistan ‘2000 AD’ incluye un reencuentro entre dos iconos del cómic británico, Dredd y Perro de Estroncio. Un manga curioso, con un tiburón como protagonista: ‘Shark Panic’. Un tomo único, publicado por Arechi Manga, que viene bien para ser devorado en paralelo a la celebración de los 50 años de la mítica película de Spielberg. ‘Tiburón’ se reestrena en salas a finales de agosto y quizás coincida en los últimos coletazos de la cartelera estival con ‘Dangerous Animals’, también con escualos de por medio… y mucha sangre. Concluimos esta suculenta y refrescante sexta entrega de la newsletter comiquera con la imagen mental de una hamaca y una sombrilla en un paisaje soleado con un horizonte formado por columnas de libros e historietas en lugar de montañas. Gracias por estar ahí.
¡Nos leemos en septiembre! ¡SALUD Y VIÑETAS!