La profesionalidad es el activo más valioso de un artista marcial mixto. El hecho de respetar aquellas condiciones que el deportista firma junto a su rival, sobre el papel, es sagrado para ambas partes de la ecuación. En la UFC, la empresa de MMA más grande y exigente del planeta, no iban a ser menos: el conglomerado de Dana White ha decidido despedir a Bryan Battle después de no cumplir, en sus últimos dos combates, con el peso pactado de cara a su compromiso con el octágono.
El anuncio se produjo el pasado miércoles por la noche. La UFC liberaba y terminaba, de manera definitiva, el contrato de Bryan Battle después de su última polémica fuera del octágono. El estadounidense iba a estar presente en la última cartelera numerada de la empresa pero, después de sobrepasar en cuatro libras el límite de peso establecido, el equipo de Dana White canceló su combate y tuvo que ver la velada desde casa.
La UFC, pese al poco profesionalismo de Battle, siempre intentó buscar soluciones para su peleador. En su última pelea en el octágono, el pasado mes de diciembre, el americano no pudo cumplir con la báscula dentro del límite del peso wélter. El ganador del The Ultimate Fighter traspasó en cinco libras la cifra establecida, y no respetó así el acuerdo con el que firmó pelear con Randy Brown, quien reaccionó de inmediato al altercado.
«Nueve entradas al octágono de la UFC, seis en la escena regional, y nunca he fallado el peso, ni una sola vez. Como un verdadero profesional. Bryan sabía que no iba a dar el peso desde el día anterior, pero aun así me dejó sufrir durante una reducción de peso. Estos tipos se esfuerzan al máximo con el porcentaje y luego llegan con sobrepeso a propósito para tener ventaja de peso la noche de la pelea. No pesaré más de 185 libras el sábado. Apuesto a que él pesará más de 200… ¿Cómo es eso justo para mí?», escribió Brown, en su perfil de Instagram.
Bryan Battle acabó por ganar aquel pleito, pero el público no perdonó al peleador y su carrera quedaba en entredicho. Tras percibir las dificultades del americano para cumplir con la báscula en el wélter, la UFC permitió al peleador subir de categoría y probar suerte en la división de los medianos, donde ya había peleado en el pasado. Sin embargo, la misma historia volvió a suceder: The Butcher sobrepasó el límite de peso por cuatro libras y dejó sin pelea a Nursulton Ruziboev.
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La UFC no perdona ahora a un peleador que figuraba entre las promesas más destacadas del conglomerado americano. Con un récord dentro de la empresa de siete victorias, una derrota y un ‘No Contest’, la poca profesionalidad de Bryan Battle condena al peleador a un ya innegable destino: dice adiós a la compañía líder en el deporte y deja entre la opinión de directiva y público mucho que desear como competidor de MMA.