Varias playas del litoral mediterráneo se han visto obligadas a prohibir los accesos a los bañistas por la presencia del peligroso dragón azul. Los dos … puntos afectados hasta el momento son Cádiz y Alicante. En el primero de ellos, este lunes se encontraron al menos seis ejemplares en el arenal de Santa Bárbara, en la Línea de la Concepción, lo que obligó a las autoridades a izar la bandera roja. En el caso de la costa levantina, su presencia se detectó el miércoles. En concreto, se avistaron dos ejemplares en las playas de Guardamar del Segura, donde el ayuntamiento de la localidad levantina ordenó impedir los accesos, una medida que se mantuvo activa este jueves.

El dragón azul –conocido por los científicos como ‘Glaucus atlanticus’– es un molusco marino de entre dos y cuatro centímetros de color azul metálico en la parte superior y plateado en la inferior que acostumbra a flotar boca a bajo en la superficie del mar. Lo que hace peligrosa a esta pequeña criatura es su alimentación. Sus principales presas son las medusas y las carabelas portuguesas, cuyos venenos acumulan en los extremos de sus apéndices. Esto hace que el simple contacto provoque dolor intenso, enrojecimiento, inflamación y, en algunos casos, ampollas, náuseas o vómitos. En niños pequeños o alérgicos, la picadura puede incluso requerir atención médica. De ocurrir, se recomienda lavar la zona afectada con agua salada, retirar los posibles restos con pinzas y aplicar paños fríos, evitando el agua dulce, el hielo o el frotamiento.

Estas peligrosas criaturas acostumbran a vivir en las aguas abiertas de los océanos Atlántico, Pacífico e Índico, y rara vez se aproximan a la costa. Según apuntan los expertos, su presencia en el litoral español obedece al aumento de la temperatura del agua por el cambio climático y a la abundancia de la carabela portuguesa. Un Mediterráneo recalentado hasta seis grados en los últimos años se ha convertido en un imán para especies habituadas a contextos tropicales como esta. Por ende, la mayor presencia de una de sus presas habituales atrae a los dragones en busca de alimento.

Los avistamientos de esta semana no son los únicos registrados en los últimos años. En 2024, se detectaron ejemplares en Gran Canaria, en la playa de Los Dos Roques, lo que obligó al cierre temporal del lugar para proteger a los bañistas. Antes, en 2021, se avistaron varios ejemplares en Torrevieja y Orihuela.