Con tan solo un par de entrenamientos desde que el pasado martes se hiciera oficial su fichaje por el Athletic, Areso dejó ayer en el … Philips Stadion los primeros trazos de lo que puede aportar al equipo. El de Cascante salió en la segunda mitad para cerrar bien la banda derecha y mostrar su verticalidad en ataque. Fue una de las notas positivas de la derrota de los hombres de Ernesto Valverde frente al PSV Eindhoven. Le bastaron 45 minutos para dejar patente que la posición que ha dejado libre el capitán Óscar de Marcos parece estar bien cubierta.

El técnico de Viandar de la Vera decidió incluirle en la convocatoria y estaba por ver si contaría con algún minuto. Visto cómo transcurrió el encuentro, el navarro tuvo que incorporarse al césped tras el descanso porque Hugo Rincón no tuvo una tarde afortunada.

El lateral que tan buenas sensaciones había dejado la pasada campaña en el Mirandés vio la cartulina amarilla en el minuto siete al verse superado en velocidad por su par, y su banda fue la elegida por los holandeses para llegar con peligro. Los anfitriones demostraron tener una velocidad más, sobre todo en la primera mitad, y fueron un verdadero dolor de cabeza para el de Valtierra.

Hasta tal punto, que estuvo cerca de cometer un penalti y el árbitro le perdonó la segunda amonestación que hubiera dejado al Athletic en inferioridad numérica. El tanto del empate de los anfitriones llegó por su banda en una jugada en la que sacaron el balón desde atrás y pusieron en jaque a la defensa rojiblanca.

Ante esta tesitura, Valverde optó por tratar de cerrar el descosido que tenía en esa parte del campo con la incorporación de Areso, y en el segundo tiempo la banda derecha emitió otras sensaciones. La velocidad del de Cascante sirvió para tener a los neerlandeses bastante más controlados y provocar que su punto de mira se girara a la izquierda.

Desborde en ataque

No solo en el aspecto defensivo. Porque Areso tampoco dudó a la hora de incorporarse al ataque, lo que permitió a la sala de máquinas del Athletic disponer de otro punto de referencia para repartir el juego. Combinó bien con Iñaki Williams y dio muestras de su desborde en velocidad en varias acciones que le permitieron poner balones o forzar un córner.

A pesar de ser el tercer amistoso de la pretemporada, el calibre del rival hizo que Valverde apostara por un equipo más que reconocible sin un nueve puro, algo que ya hizo la pasada campaña, con Berenguer como jugador más adelantado junto a Sancet y con los hermanos Williams en las bandas. Se exprimieron a la hora de presionar la salida de balón de los locales, pero el único tanto del Athletic llegó en una jugada a balón parado tras un buen centro del pamplonés que cabeceó Iñaki. Sin embargo, todavía falta mordiente en el ataque rojiblanco, sobre todo en banda.