Un hombre de 45 años, natural de Irun, falleció este martes en el hospital de Valladolid cinco días después de participar en las labores de … extinción del incendio de Cipérez (Salamanca), municipio cercano a Monleras, su lugar habitual de residencia. El varón participó el jueves de la semana pasada en el operativo que luchó contra el fuego y, según sus allegados, ese día se empezó a encontrar mal, si bien en su entorno no imaginaban que los síntomas evolucionarían hasta el punto de costarle la muerte.

Tres días después de enfrentarse a las llamas y el humo, el domingo, se le paralizó temporalmente su pierna derecha y sufrió una infección de garganta, y fue el martes cuando notó que su estado de salud se agravaba. Acudió al ambulatorio de su localidad y de allí le derivaron al hospital de Salamanca, donde vieron que necesitaba una intervención por fisura en una arteria. Al tener a los cirujanos operando en ese momento, le mandaron con urgencia a Valladolid, a donde llegó en un estado muy crítico hasta el punto de que en el centro hospitalario no pudieron más que certificar su fallecimiento.

El portavoz de Vox en las Cortes de Castilla y León, David Hierro, que conocía al irundarra por haber compartido trabajos de arqueología con él, fue quien más directamente vinculó su fallecimiento con su participación en las labores de extinción del incendio. No obstante, la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León (Sacyl) ha salido al paso de esta declaración para asegurar que el fallecimiento «no está relacionado con la inhalación de humo». Para dejarlo claro, en un comunicado ha añadido que «hasta el momento en Castilla y León se han confirmado tres fallecimientos relacionados con los incendios producidos estos días en la Comunidad».

«Era muy querido aquí»

El fallecido, Javier San Vicente, era una persona muy conocida en Irun, localidad que ha acogido con consternación su muerte. Su padre, natural de Estella, y su madre, oriunda de Salamanca, se casaron en la localidad fronteriza guipuzcoana, donde nacieron sus dos hijos, Javier e Iñigo. Viven en el barrio del Pinar, en Bera kalea, aunque pasan algunas temporadas en Salamanca.

El padre, también de nombre Javier, ha convivido con varias generaciones de irundarras ya que fue muchos años profesor en Leka-enea, donde estudió también su hijo fallecido antes de completar su formación en Pío Baroja y marcharse a estudiar Arqueología a Salamanca. El otro hermano, Iñigo, vive en Madrid pero también guarda muchas amistades en Irun, sobre todo en el entorno del club de tenis de mesa de Leka Enea en el que jugó durante muchos años.

El trágico suceso ha tenido lugar cuando toda la familia se encontraba en Salamanca, donde estos días se celebraban las fiestas patronales de varios pueblos. El cuerpo fue trasladado al tanatorio de Sardón de los Frailes, localidad de su madre, donde el jueves fue enterrado con presencia de sus seres queridos.

Mientras tanto, en el municipio de Monleras, varios vecinos declaraban a este periódico que «Javi era muy conocido y muy querido aquí, sobre todo porque se involucraba en los asuntos del pueblo y, cómo no, también en estas fechas en la extinción del fuego que nos ha asolado con tanta virulencia. El pasado jueves se marchó a combatirlo al pueblo de El Groo, que está aquí al lado, donde necesitaban ayuda».

También era reconocido en el ámbito de la arqueología. Había participado en trabajos del Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León. Lideró proyectos de recuperación de los antiguos hornos altos de la Ferrería de San Blas, en el municipio leonés de Sabero.

La autopsia determinará la causa de un fallecimiento del que se habló incluso en la Diputación Permanente de las Cortes de Castilla y León, que acordaron la comparecencia extraordinaria del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, para abordar su gestión de los incendios. El representante de la UPL, Luis Mariano Santos, primero, y posteriormente el portavoz de Vox, David Hierro, aludieron a la muerte del irundarra y la vincularon con su participación en las labores de extinción del incendio de Cipérez.

En la reunión de la Diputación Permanente se guardó un minuto de silencio por los fallecidos (tres según la Junta y cuatro para las formaciones UPL y Vox) y se dio luz verde a la petición, por parte de una quinta parte de los miembros de la Cámara, de celebrar un Pleno monográfico con la comparecencia de Mañueco en periodo extraordinario, es decir, antes de que comience septiembre.